El druida de hierro

Hace un par de días terminé de leer Hounded, el primer libro de la serie The Iron Druid Chronicles escrita por Kevin Hearne, y que no podría haberme gustado más. Esta novela de fantasía urbana está protagonizada por Atticus O'Sullivan, un druida irlandés de más de dos mil años de edad que vive en la Arizona actual con su perro Oberon, con quien se puede comunicar verbalmente gracias a un vínculo mágico que convierte al can en un personaje irresistible y simpatiquísimo. O'Sullivan narra sus aventuras en primera persona, inyectando grandes dosis de humor y sarcasmo en sus peripecias y encuentros con distintos personajes. Estos personajes van desde brujas y hombres lobo hasta un rico panteón de dioses celtas, pasando por el ocasional vampiro o demonio invitado. A lo largo de la novela, O'Sullivan se encuentra metido en un embrollo tras otro, con un montón de esbirros de su antagonista, el dios del amor Aenghus Óg, haciéndole la vida imposible. Así pues, las situaciones límite, los roces con la muerte, y los problemas peliagudos se alternan con diálogos mordaces, giros inesperados, y personajes ambiguos, engañosos, y de lo más interesante.
A estas alturas, nuestros lectores más avispados se habrán dado cuenta de que este libro suena pero que muy parecido a las novelas de The Dresden Files, de Jim Butcher, y la verdad es que no les falta razón. Excepto por los dioses celtas, absolutamente todo, desde el estilo del autor y el género literario hasta el tono de la historia, pasando por el tipo de personajes y situaciones que se narran en Hounded podría ser perfectamente una aventura de Harry Dresden, lo que, en mi opinión es algo positivo dado lo mucho que me gusta la serie de Butcher. En otras palabras: si os gusta The Dresden Files, Hounded es más de lo mismo y las aventuras de O'Sullivan os gustarán tanto como las de Dresden. Y si no os gusta The Dresden Files, hacéoslo mirar, porque algo raro os pasa.

Fantasía fantástica

Por tercer año consecutivo tuve la suerte de que mi querida esposa me regalara el Spectrum, un libro que se edita anualmente y que recoge las mejores ilustraciones del género fantástico (fantasía, ciencia-ficción, horror, Surrealismo, etcétera) hechas durante ese año. Como siempre, admirar este libro es tanto un placer como una cura de humildad, pues mientras que el talento contenido entre las cubiertas es suficiente para dejar sin aliento hasta al tipo más duro y menos interesado en el mundo del arte, la increíble calidad de las ilustraciones te hace darte cuenta de lo mucho que te falta por aprender. Así pues, a lo largo de trescientas páginas, más del doble de magníficas ilustraciones en distintos medios y tamaños aparecen ante los atónitos ojos del lector, que no puede sino apreciar la maestría y saber hacer de los artistas escogidos para formar parte de la antología. Excepto por dos o tres ilustraciones que me dejaron indiferente, el resto me pareció soberbio, y me hizo disfrutar del libro más de lo que puedo expresar, así que, si os gusta el arte fantástico, no dudéis en hacheros con esta antología anual, que os proporcionará horas y horas de placer visual. ¿Verdad que suena estupendo?

Mi última creación

Al final, el 27 de enero salió mi última creación, en la que he participado sólo un poquito ya que Reme llevó la mayor parte del peso de la construcción. Creo que ha salido bastante bien, no le falta de nada ni le sobra tampoco nada, y dentro de poco le pondré a leer conmigo los posts de este nuestro maravilloso blog. Os presento a Ángel... Ya sé que no tiene una gabardina negra pero todo llegará.

Entremeses escabrosos

Hace tan sólo tres semanas salió a la venta el sexto volumen de Chew, y me ha faltado tiempo para hacerme con él y ventilármelo. Curiosamente, leer este tomo ha sido una experiencia algo extraña ya que, en general, no me ha gustado tanto como los cinco anteriores. Por un lado, creo que esto se debe al hecho de que Tony Chu, el protagonista de la extravagante e impredecible serie, se pasa la práctica totalidad del tomo en el hospital por razones que no desvelo, con lo que el peso de la acción recae en su hermana gemela, Toni Chu. Durante la mayor parte del volumen, las andanzas de Toni me parecieron poco relevantes para el hilo argumental de la serie en general, e incluso los dibujos de Rob Guillory empezaron a hacérseme algo repetitivos y cansinos. Sin embargo, el último número recopilado en este tomo (el 30 de la serie mensual) supone un giro de ciento ochenta grados que sumerge a lectores y protagonistas en lo más oscuro, chocante, inesperado y salvaje que, en mi opinión, hemos visto en la serie. Cuando asistí, horrorizado y boquiabierto, a los eventos narrados en ese número, comprendí la razón de ser de los anteriores capítulos y los aprecié más de forma retroactiva. Aun así, confieso que el estilo de Guillory, que a Halagan desagradó desde el primer momento, está empezando a cansarme, pero pienso continuar con la serie debido a lo rocambolesco, original, y estrambótico de sus situaciones. Y es que Chew es una serie como nunca habéis leído.

Kinsey contraataca

Dos años habían pasado desde mi último encuentro con Kinsey Millhone, así que ya os podéis imaginar las ganas con que cogí V is for Vengeance, la más reciente aventura de la detective privada creada por Sue Grafton. Pero es lo que tiene estar al día en lo que a series literarias se refiere: que te toca esperar a que el autor termine de escribir los nuevos volúmenes.
Como siempre, el reencuentro con mi querida Kinsey ha sido todo un placer, y el libro me ha parecido tan magnífico como la práctica totalidad de las entregas anteriores. Como es habitual, la personalidad de Kinsey y su forma de actuar y ver el mundo me atraen más que el misterio de turno, pero la trama urdida por Ms. Grafton no se queda atrás, y la forma en que los distintos personajes acaban cruzándose e influyendo en los hilos argumentales de los demás está pero que muy bien lograda y resulta natural y verosímil.
En resumen: que espero ansioso W is for..., aunque supongo que no podré disfrutarlo hasta enero de 2015, que suena lejísimos en el futuro, pero que seguro que llegará antes de que nos demos cuenta. Hasta entonces, si nunca habéis leído ningún libro de estos Misterios del alfabeto, tenéis tiempo de poneros al día. Con que os leáis uno al mes, estaréis listos para W cuando salga, así que dejad de leer otras cosas menos interesantes y pasad un rato con Kinsey Millhone, que no lo lamentaréis.

Bucles circulares

Las universalmente positivas críticas que Looper recibió cuando se estrenó el pasado septiembre me tenían más que intrigado, y el pasado fin de semana tuve por fin la oportunidad de verla en la comodidad de mi hogar. Sin desvelar demasiado, la premisa fundamental de la película son los viajes temporales o, más concretamente, los viajes al pasado y qué se puede hacer para alterar la historia. Como explicar más me obligaría a destripar varios puntos importantes del guión, lo voy a dejar ahí, pero lo que sí diré es que la película cuenta con algunas ideas ciertamente originales y de lo más interesantes en un campo tan trillado como el de los viajes en el tiempo. Y como no sólo de nuevas ideas vive el aficionado a la ciencia-ficción, Looper está llena de intriga, acción (no en vano uno de los protagonistas es Bruce Willis), y cuenta con unos personajes humanos, interesantes, y creíbles.  En resumen: si estáis interesados en Looper y aún no la habéis visto, echadle un vistazo, que seguro que os gusta.

Tres esperpentos

Debo de haberme portado mal sin darme cuenta porque, cuando fui a ver Mama al cine el fin de semana pasado, fui castigado por una serie de trailers a cada cual más horrible.

El primero es una de esas atrocidades que tan de moda están: coger un cuento clásico y travestirlo sin ninguna razón hasta convertirlo en algo "nuevo y emocionante", "diferente y original". El adefesio en cuestión responde al nombre de Hansel & Gretel: Witch Hunters, y decir que tiene una pinta ridícula es quedarse piadosamente corto. Pero no me toméis la palabra: juzgad el trailer por vosotros mismos.

La segunda calamidad es otro de esos crímenes que también son de lo más popular: coger una adolescente estúpida, añadir grandes dosis de amor y romance gracias a un novio más o menos macizo, espolvorear la mezcla con magia y elementos sobrenaturales, poner tres cucharadas de angustia existencial (o sea: mis padres no me entienden), rebelión, y búsqueda de la propia identidad, y darle al conjunto un baño de efectos especiales mediocres que sólo a un quinceañero cretino le podrían no resultar risibles. Esto es lo que ofrece el trailer de Beautiful Creatures, que me pareció incluso peor que el anterior.

La tercera monstruosidad, que gana por goleada, se centra en el inevitable tema de moda: los manidos y ubicuos zombies. ¡Pero, atención! Esta vez hay un giro inesperado que convierte a esta película en algo original, relevante, y muy de su tiempo: una auténtica y descarnada crítica con comentario social. En Warm Bodies, el espectador se ve sometido, atónito e incrédulo, al siguiente y sonrojante delirio estúpido: un zombie interpretado por un moreno guapetón que, cuando está a punto de merendarse a la rubia de turno, empieza a recordar su vida antes de convertirse en fiambre ambulante, y gracias a la comprensión, ayuda, e inevitable amor que dicha mema acaba sintiendo por el yogurín caducado, ¡el zombie se cura y se vuelve humano otra vez! No sólo eso, sino que al ver las muestras de amor y de afecto de la feliz pareja, los otros zombies se curan también! Y es que no hay nada que el amor no venza, amigos. Si no dais crédito a mis palabras y queréis experimentar esta historia con final feliz por vosotros mismos (porque el trailer te lo enseña pero todo, todo), allá vosotros.

¿Acaso me estoy convirtiendo en un viejo carca que no comprende la cultura adolescente? Bien pensado, si esto es lo que hay que comprender, prefiero seguir rasgándome las vestiduras y señalando basura reciclada, recalentada, y regurgitada cada vez que me someten a ella. Con la de cosas interesantes que pueden hacerse con el séptimo arte...

Madre malévola

El fin de semana pasado mi querida esposa y yo fuimos a ver Mama, película de miedo presentada por Guillermo del Toro que tenía bastante buena pinta. En general, la película nos gustó mucho, ya que la historia y la ambientación son de lo más atmosférico y perturbador. Las dos niñas protagonistas prueban ser buenas actrices, y Jessica Chastain, en boca de todos últimamente gracias a Zero Dark Thirty, asume el papel de protagonista adulta con facilidad y buen hacer. Lo único que, en mi opinión, deja bastante que desear, son los efectos especiales, que me resultaron bastante lamentables y más dignos de una película de aficionados que de una producción de este calibre. Si no se tiene el presupuesto para contratar a un buen equipo de animación por ordenador, lo mejor es usar efectos tradicionales o prescidir de ellos por completo, porque, de lo contrario, deslucen el conjunto y le restan enteros a una película que, por todo lo demás, cumple todo lo que el trailer promete: sucesos paranormales, espíritus en desasosiego, y gente que insiste en entrar en cabañas abandonadas sin luz en medio de la noche cuando podrían hacerlo a las once de la mañana y no pasaría nada. Pero vamos: si os apetece ver una peli de miedo sin sangre ni tripas ni cosas asquerosas, echadle un vistazo a Mama, que vale la pena.

La última superviviente

Pues aquí está la última superviviente del grupo: la alumna de intercambio japonesa gótica. Como es bien sabido, todos los japoneses de intercambio guardan una katana en sus taquillas del instituto, así que cuando Kaori vio por la ventana de clase la horda zombie, fue corriendo a coger su arma. 

Le quise dar a esta figura una mezcla de aires, entre colegiala japonesa y gótica asesina, de ahí los colores claros para la ropa y la mochila rosa y las botas de asalto negras y las medias grises. No se aprecia muy bien, pero el color de la piel intenta ser un tanto amarillento y los labios los tiene pintado de morado. Un detalle chulo es el tanga que se ve por encima de la faldita.

Quería ponerle un tatuaje en la espalda, pero todavía no tengo la suficiente habilidad para hacer ese tipo de virguerías.

Ya sé que os estaréis preguntado dónde está el negro del grupo, pues todos los grupos lo tienen; pero es que estamos en la parte de la historia donde el simpático tipo negro que acompaña a los protas ya ha muerto.

En la segunda imagen podéis disfrutar de una foto una de las partidas de Zombicide, en Kaori y el profe de informática son los últimos supervivientes y se preparan para llevarse por delante a todos los caminantes que puedan.

El alzamiento de Shiratori

Hace un par de días terminé de leer el duodécimo volumen de Bakuman, la serie de Tsugumi Ohba y Takeshi Obata que tanto me gusta, y mientras pensaba en escribir esta entrada decidí ponerme a buscar la foto ideal para acompañarla. Coincidencia o destino, el caso es que la página que contenía la imagen que seleccioné tenía algo escrito que me sobresaltó: los creadores de Bakuman deciden terminar la serie. ¿Cómo es posible? ¿Cómo pueden hacerme esto? Y lo que es más importante, ¿cuánto tiempo le queda a la serie y qué puedo hacer para evitar que termine? El artículo decía que la serie iba a terminar el 23 de abril... de 2012. ¡Bakuman ya ha terminado en Japón! Nueve meses llevo viviendo sin saber nada de esta horrible tragedia, y ahora que lo sé no sé si preferiría seguir sin saberlo. Nueve meses hace que las aventuras de Takagi y Mashiro no se publican, y yo estaba aquí tan contento, sin saber que la serie tiene los días contados. Según el artículo, el vigésimo tomo será el último de la serie, lo que, siendo como es terribles noticias, al menos me deja saber que todavía me quedan ocho fantásticos volúmenes que disfrutar.
Hablando de disfrutar, el duodécimo volumen me ha parecido tan magnífico como los anteriores. Perfect Crime Party, la nueva serie de Takagi y Mashiro se ha convertido en una de las más populares de la revista semanal Jump, y ambos personajes empiezan a tener ideas para otras series que quieren desarrollar simultáneamente. Al mismo tiempo, uno de los asistentes de Mashiro, Shun Shiratori, cobra un protagonismo inesperado al publicar su primera historia en Jump con ayuda de Takagi. La historia de Shiratori (el personaje, no la historia que dibuja, aunque también) es de lo más compelling, y su perro Peace es de lo más simpático y enternecedor. Pero no quiero destripar nada más, así que ahí lo dejo.
Como ya he dicho, este volumen es otro formidable capítulo de la serie, y ahora que sé que sólo me quedan ocho más, espero disfrutar cada uno de ellos incluso más que en el pasado, tarea harto difícil dado lo mucho que los he disfrutado. ¿Acaso me estallarán los ojos cuando no pueda soportar tanta emoción, tanta diversión, tanta maestría y buen hacer? Espero que no, aunque nunca se sabe...

Pink Ninja

Aquí tenéis el boceto que hice en mi reunión de la semana pasada. Lo hice directamente con el rotulador rosa, y después añadí las líneas con un rotulador negro de punta fina. No me llevó más que unos pocos minutos, y tampoco me calenté mucho la cabeza, lo que supongo explica la ridiculez de hacer que un ninja vaya vestido de rosa... a no ser que vaya a asesinar al jardinero, claro.

Canguros del tiempo

Éste es mi primer libro del año, que tan acertadamente me trajeron los reyes: una novela juvenil sobre una agencia de "policías" del tiempo. Como toda novela juvenil, sus protagonistas son chavales de entre 13 y 19 años que se ponen a realizar tareas que obviamente no están al alcance de gente de su edad, pero ésa es la gracia de estos libros. Un agente se dedica a reclutar un nuevo equipo, y para ello rescata jóvenes a punto de morir y les da la opción de unirse a él o perecer.

Este nuevo equipo lo forman un camarero del Titanic, una joven informática que vive en el 2010, y una chica de 13 años de la India del 2029.

Los personajes siguen la teoría de los viajes en el tiempo de Regreso al futuro  que tan bien explicó nuestro querido Doc: si modificas la línea temporal en el pasado, para arreglarla tienes que ir a ese punto y volver a dejarlo todo como estaba. Los cambios son casi automáticos, y nuestros canguros del tiempo, ya que con esa edad llamarles polis sería de chiste, tienen que darse cuenta de que algo ha cambiado en su presente y averiguar el cuándo y el cómo. Ellos están en una burbuja temporal que les mantiene a salvo de dichos cambios, pero esta burbuja les hace repetir siempre los dos mismo días: el 10 y el 11 de septiembre de 2001 en la ciudad de Nueva York. Cómo no, su primera misión es arreglar el pasado para que los alemanes no ganen la Segunda Guerra Mundial después de que un científico del futuro decidiese echarle una mano a Hitler para cambiar las cosas.

El libro está escrito de forma ágil y rápida, pero eso de las paradojas temporales parece que no va con el autor. De hecho, los protagonistas sólo se encuentran con otros viajeros del tiempo en algunas ocasiones; y en otras, cuando no interesa, pues no. Tampoco es capaz de reflejar que los chavales vienen de tiempos completamente diferentes ni en la forma de hablar ni de hacer las cosas. Hay también demasiadas cosas que no explica, como la falta de medios con la que cuentan para llevar a cabo las misiones, o la falta de apoyos externos, pero es el primer libro de la saga, así que habrá que darle una oportunidad.

Ratoncillo

Aquí tenéis un dibujillo rápido que hice la otra noche en una tarjeta de agradecimiento para una profesora de la escuela. Acababa de terminar el dibujo de Alicia que os enseñé el otro día, así que tenía el ratón fresco en mi cabeza, con lo que decidí no calentármela mucho y dibujar algo parecido para cumplir sin invertir mucho tiempo en el asunto. El minimísimo encaje a lápiz y posterior acabado a tinta me llevaron unos cinco minutos, lo que me pareció tiempo más que razonable para hacer este dibujillo. Espero que os guste!

Burning Bright

Según Blogger, la entrada de hoy es la número 2.000 desde que Sunny Jhanna empezó su andadura en noviembre de 2005, y nada mejor para celebrar tal ocasión que con un dibujillo.
Tras un encaje rápido a lápiz, cogí mi Pentel pocket brush pen, y me puse a jugar a las simetrías felinas, a ver qué pasaba. El dibujo no me llevó más que unos pocos minutos, pero espero que os guste, y que celebréis nuestro aniversario con nosotros!

Aleaciones peligrosas

Hace poco terminé de leerme Echo, que mi querida esposa me regaló para Navidades. Llevaba tiempo ya queriendo leer algo de Terry Moore, autor que se hizo famoso con su primera serie, Strangers in Paradise, que duró trece años y está recopilada en diecinueve (¡19!) tomos. Arriesgarme con una serie tan larga se me hacía difícil de concebir, así que opté por pedirme su segunda y más accesible serie, Echo, cuyos treinta números recibí recopilados en The Complete Edition, volumen este que tampoco se queda corto en lo que a extensión se refiere, pues cuenta con casi seiscientas páginas. Afortunadamente, tanto la historia como las ilustraciones (todo a cargo de Moore) me encantaron, y me merendé el tomo completo en tan sólo unos días. La historia, con personas normales que se ven envueltas en una trama con tintes de ciencia-ficción, es muy interesante, pero lo mejor, en mi opinión, son los diálogos y el desarrollo de los personajes a lo largo de la historia. Los dibujos son también fantásticos, especialmente las caras de las mujeres, que a Moore le quedan de maravilla. Tanto me ha gustado, de hecho, que he empezado a plantearme seriamente el hacerme con el primer tomo de Strangers in Paradise, aunque creo que primero esperaré a que termine y recopile su tercera serie, Rachel Rising, que, según tengo entendido, mezcla el terror con elementos sobrenaturales, y suena de lo más bien. Mientras tanto, tengo más que material suficiente para seguir leyendo, incluyendo los siguientes cuatro volúmenes de Bakuman, que me miran desde la estantería pidiéndome que los abra. Mesura y moderación es lo que me repito a diario. Mesura y moderación.

Starkblast

Como todos los que hemos seguido el Path of the Beam sabemos, ka is a wheel, pero, más que una rueda, The Wind Through the Keyhole es una matryoshka: una de esas muñecas rusas que contienen otra en su interior, y otra dentro de ésta, y luego otra más. Y es que la nueva novela de La torre oscura está construida en base al recurso literario de la historia dentro de la historia dentro de la historia que tanto me gusta. Pero empecemos por el principio.

Stephen King terminó su famosa serie de La torre oscura en 2004 con la publicación del séptimo y último volumen de la saga, The Dark Tower. Sin embargo, el año pasado publicó The Wind Through the Keyhole, un libro corto (trescientas páginas) que transcurre entre el cuarto y quinto libro de la serie, y que mi querida esposa me regaló para mi cumpleaños. Tres días me costó devorarlo, y hay que ver lo bien que me lo pasé regresando a Mid-World y pasando varias horas de lo más agradables junto a Roland Deschain y su ka-tet. Y hay que ver lo mucho que me deleitó descubrir que la estructura de la novela es muy parecida a la del cuarto libro de la serie, Wizard & Glass.

Las primeras 50 ó 60 páginas del libro transcurren inmediatamente después de los eventos narrados en Wizard & Glass, y el lector encuentra a Roland y su ka-tet caminando hacia las Outer Baronies. Sin embargo, algo los obliga a parar y hacer noche en un pueblo fantasma, y el ka-tet le pide a Roland que les cuente una historia de su juventud. Roland acepta, y en las siguientes 40 ó 50 páginas el de Gilead narra una aventura en la que él y su compañero Jamie DeCurry se vieron envueltos cuando eran jóvenes. Sin embargo, a mitad de esta aventura, el joven Roland de la historia le cuenta otra historia a alguien, y es ésta historia, llamada The Wind Through the Keyhole, la que constituye la parte central de la novela con una extensión de unas 160 páginas. Una vez el joven Roland termina de contar esta historia que no es sino un cuento de hadas oscuro y retorcido, el Roland del presente termina de narrar su aventura con Jamie en cosa de 10 ó 15 páginas, y luego la acción regresa al presente con las reacciones del ka-tet a lo que su dinh les ha contado.

Como buen aficionado tanto a Stephen King como a la serie de La torre oscura, The Wind Through the Keyhole me ha encantado, y por más de una razón. Primero, porque las tres historias me engancharon completamente. Segundo, porque volver a encontrarme con estos personajes después de nueve años y volver a sentir el misterio y la rareza que Mid-World desprende fue una experiencia fantástica. Y tercero, porque dado que ahora tengo menos tiempo para leer que cuando salieron los últimos libros de la serie, trescientas páginas me parece la extensión perfecta para una novela. ¡No podría haber empezado el año con mejor pie!

Donde nadie puede oír tus gritos

Dado que hace bien poco Nash nos enseñó las miniaturas de Space Hulk que había estado pintando (1, 2, 3, y 4), el anuncio del nuevo videojuego basado en dicho juego de mesa no podría llegar en mejor momento. De hecho, las miniaturas nos hicieron comentar que sería estupendo que los tres Blogueadores oficiales del reino pudiéramos reunirnos y echarnos una partida, pero como coincidir los tres geográficamente es bastante difícil, tal vez esta versión informática del juego de tablero sea la respuesta a nuestro dilema. Al parecer, el juego saldrá en algún momento de este año para PC, Mac, y IOS, así que, si incluye la opción de jugar online, creo que deberíamos hacernos con él a ver qué pasa. No sé vosotros, pero yo estoy emocionado. Aquí os dejo el vídeo con el anuncio:

El cuentacuentos

Aquí tenéis el segundo dibujo que he hecho para What is the Use of a Book without Pictures. Tal y como os conté cuando os enseñé el primer dibujo, el propósito de este proyecto es narrar Alice's Adventures in Wonderland de Lewis Carroll usando sólo imágenes sin texto alguno. El pasaje que el editor me mandó esta vez era:

The Mouse did not notice this question, but hurriedly went on, ‘ “ – found it

advisable to go with Edgar Atheling to meet William and offer him the crown.

William’s conduct at first was moderate. But the insolence of his Normans – ”

Tras darle varias vueltas al tema, acabé haciendo el dibujo que tenéis aquí al lado. Por un lado, tenía que contar lo que está pasando en la historia: el ratón contándole una historia a Alicia y al resto de animales que acaban de salir del Lago de lágrimas al que habían caído. Por otro, tenía que contar la historia que el ratón estaba contando: cómo Stigand, el arzobispo de Canterbury, decide acompañar a Edgar Atheling a entregar la corona a Guillermo el Conquistador. Lo mejor de todo el asunto es que siempre estoy diciendo lo mucho que me gusta el recurso literario de la historia dentro de la historia, así que el hecho que editor me asignara precisamente una escena como ésta no deja de ser de lo más irónico.

Para más información acerca del proyecto, leed mi entrada original o visitad la página de Facebook del proyecto. Y si queréis ver el dibujo con los otros de la secuencia y comparar las distintas interpretaciones de la escena y los personajes, pasaos por aquí.

El protegido

Sí, ya sé que he tardado 12 años en verla, que se dice pronto, pero todo el mundo que me habló de ella en su día me dijo que era muy mala, así que fui dejándolo y dejándolo hasta que al final el fin de semana pasado la pusieron en la tele y me quedé a verla.
Y debo decir que a mí me ha gustado bastante. El protegido está muy alejada de la típica película de Willis, y aunque no es tan intensa como El sexto sentido ni te sorprende tanto, está muy bien llevada. El ritmo es lento y la película casi no tiene acción, pero es que no la necesita: de hecho, es mejor que no la tenga.
Como casi siempre, Samuel y Bruce lo hacen genial en sus respectivos papeles, y la intriga se mantiene hasta el final, que es prácticamente lo único que no me gusta, ya que eso de ver visiones del pasado ya me parece muy fuerte, y pienso que deberían haber resuelto el tema de otra manera.
Aun así, El protegido me parece una película muy recomendable

Patinadora superviviente

Todos los grupos de supervivientes de cualquier tipo de catástrofe natural o causada por el hombre tienen a la tía buena que encima da caña, y este grupo no podía ser menos. Como las rubias ya están muy vistas, me decanté por una pelirroja. Dina trabaja como camarera en la cafetería del instituto, y cuando los zombies entraron por todas partes masacrado a los clientes, ella no se lo pensó dos veces, cogió la sierra eléctrica de uno de los jardineros caídos, y se abrió paso a toda velocidad con sus patines troceando a quien se pusiese por el medio. 

El uniforme lo pinté en plan cafetería chunga de los USA, con colores morados y turquesa, haciendo juego con el suelo del local, como hemos visto en infinidad de películas. Como detalle, puse el rastro de sangre que dejan los patines al pasar por un charco de sangre que ha dejado algún pobre diablo.

Espero que os guste.

Apocalipsis multicolor

Una vez entintado el dibujo, me puse a colorearlo con rapidez, y el resultado es el primer dibujo de la serie de aquí al lado. Tras terminar de jugar con mis rotuladores, escaneé la ilustración y dejé que mi querida esposa la editara de varias maneras diferentes. Como no sabía por cuál decidirme como versión final para añadir el texto, le mandé las ocho posibilidades al cliente, y le pedí que eligiera la que más le gustara. Quizá no sorprendentemente, se decantó por la número 7 (el el rincón de bajo a la izquierda), y me dijo que no me preocupara por añadir el texto, que ya lo haría él. Espero que os haya gustado esta mini serie!

Jinetes entintados

Una vez tuve el boceto a lápiz listo, me puse a entintarlo. Sin embargo, esta vez utilicé un procedimiento diferente. Uno de los regalos que mi querida esposa me hizo para Navidades fue una lightbox, que, como su propio nombre indica, es una caja con luces LED sobre la que puedes poner papeles para calcar lo que sea gracias a lo brillantes que son las luces. Hasta ahora, siempre que había necesitado calcar algo tenía que ponerme en la ventana a la hora adecuada para pillar al sol en la posición ideal, pero ahora que tengo esta herramienta, se acabó el adorar al astro rey. Obviamente, podría haber entintado el boceto como suelo hacer, pero ésta me pareció la ocasión perfecta para probar mi nuevo juguete. Así pues, me puse manos a la obra, y calqué/entinté/embellecí el boceto original, y el resultado podéis verlo aquí al lado. El siguiente paso era colorear el dibujo, pero para eso tendréis que esperar a mañana.

Boceto apocalíptico

Hace varios meses, los pertinaces Gateway 2 Nowhere me pidieron que les hiciera otro dibujo para su nuevo disco que sale en abril. Esta vez me dieron instrucciones bastante precisas, ya que querían a los cuatro jinetes del Apocalipsis, así que me puse a darle vueltas al tema a ver qué se me ocurría. Al final, tras varias ideas y diseños descartados, me decidí por el boceto que acompaña estas líneas ya que creo que la composición se presta bastante bien al formato cuadrado de la carátula del disco. El siguiente paso es entintarlo todo, pero para eso tendréis que esperar hasta mañana!

Pinceladas caninas

Aquí tenéis más experimentos con el Pentel pocket brush pen que me regaló mi querida esposa para Navidades. En vez de monstruos ciclópeos, el tema de hoy es perritos simpáticos, así que aquí al lado podéis ver varios canes que me dio por dibujar con el pincel en cuestión. El observador avispado sin duda reparará en que parece que me apetecía dibujar arrugas, ya que la mayoría de líneas en todos estos bocetos son precisamente arrugas varias. Como ya dije ayer, los resultados con esta herramienta me parecen de lo más interesante, y aunque siento que no tengo demasiado control todavía, la verdad es que me lo pasé en grande dando pinceladas a diestro y siniestro. A ver si encuentro más tiempo y guarreo con el pincel un poco más. Enjoy!

Pinceladas monstruosas

Uno de los regalos que mi querida esposa me hizo las pasadas Navidades fue el famoso Pentel pocket brush pen. Normalmente, siempre entinto con rotuladores o bolígrafos técnicos porque los pinceles se me dan fatal. Quedan muy bien y todo eso, pero la técnica me resulta dificilísima y nunca la utilizo. Sin embargo, tenía curiosidad por probar este híbrido entre pincel y rotulador, así que me lo pedí para Navidades, y aquí tenéis lo primero que he hecho con él. Como podéis observar, el grosor de las líneas cambia visiblemente de un lugar a otro, la mayoría de veces contra mi voluntad. Aun así, el resultado es bastante curioso y le da un acabado distinto a los dibujos, más suelto y con mayor fluidez. Aunque esto no es más que un experimento rápido que hice en unos pocos minutos y que me quedó un tanto horrible, espero que os guste!