Me gusta leer y ver la tele

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Thursday, August 24, 2017

Malditas hadas

Fluff my Life es el título del segundo volumen de I Hate Fairyland, de cuyo hilarante y retorcido primer volumen ya os hablé en marzo de este mismo año. La acción comienza cierto tiempo después de los despropósitos narrados en el primer tomo, y debido a cómo terminan ahí las cosas, la pobre Gert está muerta de aburrimiento. Afortunadamente, su suerte no tarda en cambiar, y a partir de ahí, la desequilibrada y psicopática jovencita vuelve a aterrorizar el País de las Hadas junto a su sufrido compañero de fatigas, el moscardón Larry.

Al igual que sucedía en el primer volumen de esta serie escrita y dibujada por el tremendo Skottie Young, las aventuras de Gert me hicieron reír a mandíbula batiente al mismo tiempo que me dejaban con la boca abierta página sí y página también gracias al derroche de creatividad del que Mr. Young hace gala. Los personajes, los paisajes, los nombres, las situaciones, la violencia desenfrenada: todo es tronchante, y todo está ilustrado con el estilo vibrante y energético por el que el autor es conocido.

Y los colores de Jean-Francois Beaulieu no hacen sino elevar el conjunto y hacerlo aún más visualmente atractivo con sus tonos color caramelo, sus tintes azucarados, y sus psicodélicas elecciones a la hora de colorear este desquiciado País de las Hadas.

Como ya dije en su día, éste es el comic perfecto para que los padres y sus hijos pequeños pasen un agradable rato en familia viendo a la joven Gert despedazar a hachazo limpio a todo aquel con que se cruza, y siguiendo los crímenes y el sendero de destrucción que la entrañable protagonista deja a su paso mientras trata de encontrar la forma de regresar a su mundo y a su casa, de donde desapareció hace ya treinta años, tiempo este que ha pasado en el País de las Hadas intentando escapar. Así está la pobre...
Le daría cinco estrellas al tomo, pero temo que Gert las encuentre y las desuelle con un cuchillo de carnicero, así que mejor no lo puntúo, y así al menos salvo a cinco inocentes estrellas de tan cruel destino. ¡Lectura obligatoria para todos!

Sunday, March 05, 2017

Que les den a las hadas

I Hate Fairyland es una serie de Image escrita y dibujada por el gran Skottie Young, quien demuestra lo gamberro que es a lo largo de los cinco números que este primer tomo recopila.

Todo empieza cuando Gertrude, una inocente niña de diez años, va a parar a Fairyland, el Mundo de las Hadas en el que todo es magia y criaturas fantásticas. Tras darle la bienvenida a tan maravilloso lugar, Cloudia, la Reina del Mundo de las Hadas, le dice que tiene que encontrar la llave mágica que la devolverá a su hogar, aventura esta que le llevará un día, aproximadamente. Para ayudarla en su búsqueda, la Reina Cloudia le asigna un guía: una especie de moscardón llamado Larry. Poco trabajo tendrá Larry: en cosa de un día, su misión habrá terminado, ¿no?

Todo lo anteriormente narrado sucede en las primeras tres páginas del comic. En la cuarta, el lector se encuentra con algo inesperado: han pasado veintisiete años, y Gertrude todavía no ha encontrado la llave. Pese a que su cuerpo no ha envejecido y sigue pareciendo una niña de diez años, realmente han pasado veintisiete años para ella, con lo que la inocente Gertrude de hace casi tres décadas ha desaparecido, y se ha transformado en una psicopática máquina de matar que odia el Mundo de las Hadas y no duda en insultar, abusar, y desmembrar a todo aquel que se cruce en su camino y le impida regresar a casa.

Viñeta tras viñeta, página tras página, las desventuras de Gertrude y Larry resultan hilarantes, desproporcionadas, satíricas, delirantes, y un sinfín de adjetivos más. E ilustradas por Skottie Young y coloreadas por Jean-Francois Beaulieu, las correrías de los protagonistas resultan aún más atractivas si cabe. ¿Quién habría pensado que ver a una niña asesinar a sangre fría a la Luna de un cañonazo (un ojo sale volando por allí, el cerebro por allá) podría ser tan divertido? ¡Ni los Hermanos Grimm en sus momentos más oscuros le hacen sombra a este demencial cuento de hadas!