Me gusta leer y ver la tele

Friday, January 18, 2008

Nos Vemos En El Cine - I Am Legend

Anteayer me di un homenaje y me fui al cine con un amigo. Tras intensas deliberaciones (siempre que al decir "intensas" querramos decir "estúpida" y al decir "deliberaciones" nos refiramos a "conversación telefónica") acabamos a las diez y media en un patio de butacas, atentos ante los primeros compases de la nueva película de Will Smith.

I Am Legend (dirección de Francis Lawrence; guión de Mark Protosevich y Akiva Goldsman sobre la novela homónima de Richard Matheson) es una buena película, fuerte y segura, que es echada a perder por un tercer acto completamente inadecuado. Es decir, que estoy totalmente de acuerdo con la crítica que ya hizo Fel aquí. La película es muy buena, pero los últimos veinte minutos dejan un muy amargo sabor de boca.

La trama ya la conocemos de sobra. Como bien resumió ya Fel, "Robert Neville, (es) un científico militar que parece ser el último humano vivo en el planeta después de que un virus terrible haya aniquilado al resto de personas. Neville lleva ya tres años sin más compañía que su perra Sam y algún que otro maniquí con el que intenta mantener conversaciones que no suelen llegar a buen puerto. Y además de vagar por las desiertas calles de Nueva York, el científico también se dedica a tratar de encontrar un remedio para la situación actual."

En eso se nos va el primer acto de la película. En eso, y en descubrir que (Spoilers)Neville (Smith) y Sam (Abby) en realidad no están todo lo solos que pensábamos. Las personas infectadas por el virus son ahora vampiros, que se ocultan de día y campan a sus anchas por la ciudad al ponerse el sol.
Tras un primer turning point, en el que vemos a Neville capturar a una hembra vampiro para seguir probando en ella una cura contra el virus,
(Fin Spoilers) el segundo acto se desarrolla exactamente igual que el primero, con un ritmo excelente y una tensión que te mantiene pegado a la butaca. Y saltando del susto en ella de vez en cuando, sin que se recurra a ningún truco barato para ello.
Como, de nuevo, dijo Fel: "La película ofrece grandes dosis de miedo y suspense bien hecho. No hay borbotones de sangre o sustos gratuitos, sino que son la iluminación, los decorados, y la actuación de Will Smith los que transmiten esa sensación de desasosiego, de que algo no es como debería ser".
La verdad, todo el metraje durante esos dos primeros tercios de película es cine del bueno.

Y luego empieza el tercer acto, que prácticamente lo echa todo a perder. No porque sea especialmente malo, la historia se desinfle o toda la tensión se pierda. El problema está en el ritmo. Es cortado de raíz. Hasta ahora, la historia ha seguido un paso firme, seguro, que nos ha ido dirigiendo poco a poco hacia, primero, el comienzo del tercer acto (es decir, el segundo turning point), y luego hacia el clímax.
Pero el tercer acto llega sin avisar. Y es que en el segundo turning point, (Spoiler)Sam ha sido infectada, por lo que Neville se ve obligado a sacrificarla. Entra así en una profunda crisis de la que sólo se le ocurre salir a base de cargar de forma suicida contra los vampiros. Pero será salvado por dos nuevos personajes, que llegan con un mensaje de esperanza: hay más supervivientes humanos, y han formado una colonia en Vermont(Fin Spoiler). Se crean así unas expectativas de esperanza y resolución en el espectador, que asiste con ganas a lo que parecen los últimos compases del segundo acto. Pero, de nuevo, no será así, ya que ya estamos inmersos de lleno en el tercero.
De hecho, cuando llegamos a lo que parece (siempre siguiendo el ritmo interno de la película) el segundo turning point (Spoiler)(los vampiros atacan el refugio de Neville)(Fin Spoiler), nos damos cuenta demasiado tarde de que en realidad lo que estamos viendo es el clímax de la película, que ha llegado muy pronto, demasiado pronto, sin la suficiente preparación previa. Sí. Llega de improviso y torpemente, y deja un muy amargo sabor de boca.

Al parecer, el final que ha sido editado fue un cambio de última hora, pues un final alternativo (Spoiler)en el que Neville entregaba a los vampiros el cuerpo de la Hembra Alfa y estos se retiraban, dejando a nuestros héroes escapar a Vermont(Fin Spoiler) fue antes rodado y descartado. No digo que de no haberlo cambiado se hubieran solucionado todos los problemas de ritmo que menciono. Y en parte no lo digo simplemente porque no lo he podido ver. Pero desde luego sí hubiera cuadrado más dentro del esquema general de la película. Y es que una historia dramática es un todo, y si algo se altera, ese todo pierde en mayor o menor medida el sentido. Es muy raro que un cambio de última hora a un guión bien planificado aporte más de lo que haga daño.

Un tema relacionado con ese cambio de final, y que tiene toda la pinta de haber sido potenciado (no voy a decir añadido, por peligro a mear fuera del tiesto) a posteriori, es el de la creencia o no en un ente divino. Aparece de repente, sin darnos tiempo a creérnoslo, pues la película, hasta entonces, nos ha llevado por un camino completamente distinto. Y no está lo suficientemente desarrollado, como no está lo suficientemente desarrollada tampoco (Spoiler)la relación de Neville con sus salvadores, Anna (Alice Braga) e Ethan (Charlie Taha)(Fin Spoiler). Y no lo están, de nuevo, porque el clímax llega muy pronto, de repente, y nos deja una resolución simple y rápida que no termina de satisfacer del todo. Como ya dije de 28 Weeks Later, a esta película no le hubieran venido mal otros veinte minutillos de duración.

En cuanto a los personajes, dos son por supuesto los principales: Robert Neville y su perra Sam.
El primero está maravillosamente construido, gracias tanto al guión como, sin duda, a la excelente interpretación de Will Smith. Vemos a un Neville que, tras tres años sólo, se ha vuelto un paranoico, y que en cuanto se cortan sus lazos con la realidad reacciona de forma impulsiva y extremista, aunque muy comprensible también.

Muy a grandes trazos, su historia me recuerda la del náufrago Chuck Noland, personaje interpretado por Tom Hanks en Cast Away. En aquella película vimos dos claramente diferenciadas partes: la primera, en la que Noland se queda sólo y trata de adaptarse a la situación, y la segunda, en la que, tras tres años, se ha convertido en un superviviente.
Personalmente, me hubiera gustado presenciar esa primera mitad aquí, en I Am Legend. Porque ya desde el primer momento el personaje de Neville aparece como alguien adaptado a su situación, que ha dejado los primeros pasos de la lucha atrás. Ya digo que es una opinión muy personal, pero hubiera preferido que, a base de flashbacks o de lo que fuera, nos hubieran mostrado algo de la vida de Neville en cuanto se queda realmente solo, y cómo reacciona a ello.
Por otro lado, también soy consciente de que cargar de flashbacks la película habría sido contraproducente, pues (Spoiler)habría restado peso a los que sí vemos, y que ejercen un enorme peso anímico sobre Neville, pues son como pesadillas en las cuales revive una y otra vez el momento preciso en que perdió a su mujer e hija.(Fin Spoiler)

También deja una sensación ambivalente el hecho de que toda la información que recogemos acerca del propio Neville la intuimos, más que conocerla con seguridad. ¿Qué papel jugó exactamente en la época durante la que se propagó el virus? Ni idea, aunque la verdad, da un poco lo mismo, pues sin otra gente a su alrededor con la que poder interactuar, da igual quién haya sido él en el pasado. Su circunstancia ha cambiado, ha sido eliminada. Y en esta historia concretamente importa quién se es ahora, no hace tres años.

Y luego está el otro personaje principal: la perra Samantha. No puedo decir mucho aparte de que mola, y realmente se llega a sufrir por lo que le pueda pasar. ¡Que le den un Oscar a esa perra ya!
Como nota aparte relacionada con su personaje, hace falta decir que, en lo que a la historia se refiere, hay ciertas reglas internas que son demasiado convenientes, como el hecho de que (Spoiler)los perros no puedan contagiarse del virus por vía aérea, sino sólo por contacto. Así, Sam acabará infectada, pero sólo cuando resulta adecuado para la trama establecida.(Fin Spoiler)

Por último, la dirección de Francis Lawrence me ha parecido simplemente excelente. Y la imagen, en general, es espectacular. La desierta y desmejoradísima ciudad de Nueva York es otro personaje más. Un escenario perfecto para transmitir la tensión que desprende esta película.
Un consejo: vedla, porque esta película merece sin duda ser vista. Pero que nadie se haga demasiadas ilusiones.

Nos Vemos En El Cine: Declaración de Intenciones.

10 comments:

Mario Alba said...

Algún que otro spoiler en este comentario: avisados quedáis.

Coincido con tu crítica, como ya te has dado cuenta. La peli pasa de estar muy bien a la mediocridad más absoluta. Para mí, la aparición de la chica y el niño no es sino un deus ex machina con muy poco maquillaje. Pasamos de pensar que Neville es el último hombre en la tierra a que de pronto dos supervivientes de los que no teníamos razón alguna para pensar existen aparezcan y lo salven justo cuando ha decidido rendirse y dejar de luchar. Truco barato, y mal hecho.

La interacción de Neville con estos dos no está mal, y me gusta la discusión que tienen, en la que Neville le dice que ni hay dios ni leches. Y sin embargo, al final, Neville se cambia la chaqueta y dice que claro que lo hay, que por eso han aparecido estos dos ahí.

No sabía lo del final alternativo, pero lo que sí sé es el porqué del título original, que en la película se pasan por el forro. Pero llegan mis alumnas, así que sigo luego.

Mario Alba said...

He vuelto. El título I am Legend hace referencia a que, en la historia original, los monstruitos forman una nueva sociedad organizada y ven a Neville como "el coco", el monstruo, el tipo que vive fuera de la sociedad y viene por la noche a matarlos. Neville se convierte así en una leyenda entre los "malos", una criatura mítica.
En el desafortunado final de la película, se dice que Neville es leyenda por haber encontrado la cura. Laaaaaame!

Anonymous said...

Fel:
Coincido por supuesto en que el recurso de introducir a la chica y al niño es un DEM en condiciones. Y digo en condiciones porque, al menos, la película nos prepara para ello. No en vano se nos muestra a Neville día tras día en el muelle, y oímos claramente el mensaje que está radiando.
Así que, sí, coincido en que es un truco barato. Pero no me parece que esté mal hecho.
Claro que, pensando en ello, se podría decir: ¿estuvieron esperándole todo el día en el puerto? ¿y por qué no le vieron cuando fue a poner el maniquí/trampa para los vampiros?
Sigo pensando que es un error menor. Pero error al fin y al cabo.

Sobre la interacción entre ellos, dices que no está mal. Y yo digo lo mismo, excepto por el hecho de que la inminencia del clímax (el ataque a la casa), que se les echa prácticamente encima, hace que no se desarrolle lo suficiente. Aunque lo que está, está bien.
Sobre la falta de transición en la decisión de Neville de, repentinamente, creer en Dios, no digo que eso no pueda pasar en la vida real, pero en la gran pantalla, si no se nos muestran unas bases claras que puedan luego llevar a ello, no se obtiene un resultado creíble. Como es claramente el caso.

Y sobre el porqué del título, yo lo he sabido a raíz de leer en IMDb o en Wikipedia acerca de la película, con lo que cuando la ví no me pareció que hubiera ningún problema al respecto.
Pero ahora, a posteriori, entiendo muy bien de lo que hablas. El concepto original tiene infinitamente más peso que la pobre versión que da la película.
Si el de la leyendicidad de Neville es un tema que no querían tratar, pues haberle cambiado el título y tan amigos. No sé, podrían haberla titulado The Omega Man, o algo así.

Desde luego que es una pena lo del final, porque lo que son los dos primeros tercios de la película son buenos a rabiar.

Mario Alba said...

Hal dijo:

"¿estuvieron esperándole todo el día en el puerto? ¿y por qué no le vieron cuando fue a poner el maniquí/trampa para los vampiros?"

Y no ya sólo eso. Como ya he dicho alguna vez, me creo lo imposible, pero no lo improbable. Tres años tres lleva el bueno de Neville radiando su mensaje, ¿y cuándo aparecen los primeros receptores? El mismísimo día en que el buen científico decide mandarlo todo a tomar por saco y hacerse uno con la Fuerza. Venga ya, hombre.

En lo del clímax estoy de acuerdo contigo: llega demasiado pronto y sin avisar, de forma que ni es clímax ni es nada. Y ésa es otra: con lo preparado que está Neville para cualquier eventualidad, y sabiendo cómo se las gastan los monstruitos, ¿por qué tiene cero medidas de seguridad en el laboratorio? Y eso por no hablar del fabuloso error de estrategia que bajarse al sótano en vez de salir a campo abierto supone. ¿Que hay monstruos fuera y huir será difícil? Sin duda. ¿Que todos esos monstruos van a entrar y rodearlo en el sótano y no dejarlo salir hasta que se lo merienden? Indudablemente. Y el tío coge y baja. Venga ya, hombre.

Y sobre el título, pues eso: que pasa de ser irónico y corrosivo (me parece una crítica brutal a la sociedad y a quienes margina por ser diferentes; el "bien" es un concepto relativo; etc.) a servir el típico rollo cristiano de "sacrificarse es el mayor honor al que un héroe puede aspirar". Venga ya, hombre.

Anonymous said...

Sí, demasiada casualidad. Debo reconocer que a mí no me terminar de importar demasiado porque, como ya escribí, la historia nos prepara para ello. Pero estoy de acuerdo en que es demasiada casualidad.

Y también estoy de acuerdo en lo que respecta al sótano como refugio. Ya se podía haber construido una habitación del pánico o algo el tío.

Fijo que, si hurgamos más, le sacamos alguna otra pega al guión. A ver que piense...

Mario Alba said...

Una peli que no me compraré en DVD. QUé bonito es esto de ahorrar :)

Anonymous said...

Otra debilidad de la película es la carencia de subtramas. Obviamente, no mencioné esto antes porque no es realmente algo malo, y menos teniendo en cuenta la premisa desde la que partimos.
Aparte de la relación Neville/Macho Alfa, creo recordar que no hay ninguna otra.

Mario Alba said...

Es verdad que sólo hay una trama central y poco más; aunque supongo que sería difícil tener más cuando tienes básicamente un personaje en la película. Lo bueno es que está bien hecha... hasta que al final se estropea.

Anonymous said...

La verdad es que con todo el mundo con el que he hablado del tema dice lo mismo. El final es muy decepcionante.
Mucha regla sobre el drama, mucho consejos sobre el diálogo... Pero, a la hora de la verdad, si algo no funciona se da cuenta cualquiera, aunque no sepa decir con palabras dónde está el fallo.

Mola el cine. Es democrático y eso.

Mario Alba said...

Es verdad que cuando algo no funciona, se nota, aunque no puedas expresarlo con exactitud. Y en el caso de IAL, el final no funciona. Pero nada.