Me gusta leer y ver la tele

Thursday, March 05, 2009

Conquistando las tierras del norte

Los elfos oscuros, capitaneados por Vheto Slidecaster, ganaron el campeonato de "El viejo mundo", una tienda de Warhammer que ha abierto sus puertas hace poco en Granollers, cerca de donde estoy viviendo. Me apunté a la competición con intención de conocer gente y pasar un buen rato, y resulta que acabé siendo el campeón absoluto del torneo.

Vheto Slidecaster dejo al pobre Gnasher, su gélido, en los establos para montar a la impresionante mantícora con la que arrasó a todos sus rivales.

En un campeonato de Warhammer normal se juegan tres partidas, dos por la mañana y una después de comer. (No entiendo por qué siempre son los domingos y no los sábados, pero creo que es algún tipo de tradición.) Las partidas suelen ser batallas campales, dos ejércitos uno enfrente del otro con algún obstáculo por medio, y el objetivo es matar lo máximo posible perdiendo el mínimo de tus tropas. Los que ganan se van enfrentando entre sí, con lo que aunque la primera partida te toca jugarla contra gente de cualquier nivel, en la segunda o tercera partida sabes que te va a tocar contra rivales duros.


En la primera partida, los elfos de Vheto Slidecaster se enfrentaron a los Bárbaros del caos, que, como su propio nombre indica, son unos tipos muy bestias de aires vikingos en el diseño de su indumentaria. Los pobres no tuvieron muchas opciones, pues no dejé ni una miniatura sobre la mesa, y únicamente perdí una de mis caballerías ligeras.

En la segunda partida, Vheto se enfrento a otra casa de elfos oscuros, pero el ejército de Vheto es muy rápido, pues está compuesto por carros de guerra, caballerías ligeras, arpías, y la todopoderosa hidra. El ejercito rival estaba basado en bloques de infantería y mucha pero que mucha magia... pero los pobres magos del ejército rival no dieron pie con bola y no sólo practicamente no consiguieron lanzar hechizos sino que sus pifias provocaron su muerte. De nuevo, no quedó ningún rival vivo sobre la mesa.


La tercera partida fue harina de otro costal, pues resultó ser un durísimo combate contra tropas imperiales (nada de clones ni de Vaders; eso es otra saga). Los imperiales de Warhammer son como los tercios españoles, con arcabuces, grandes bloques de infantería, y algún que otro fanático religioso (más conocido como sacerdote), pero tienen un tanque que, aunque muy rudimentario, resulta ciertamente destructivo, con cañones y magos. En esta partida, Vheto consiguió salvar la vida de puro milagro después de que una bala de cañón le impactase de lleno y que el sacerdote de turno le estampase una mega maza de combate. Aunque él consiguio sobrevivir, el resto del ejército fue prácticamente aniquilado, y sólo las sombras capitaneadas por el temible Nashardoom (un asesino elfo oscuro) y el otro noble de la casa Slidecaster consiguieron salvar la vida. Pero lo único que sobrevivió del rival (y con menos de la mitad de sus vidas) fue el tanque. Al final, esta partida terminó con un valioso empate.

Aquí os dejo también un link para que veáis las fotos de cómo es un campeonato de Warhammer en una tienda chula, que he ido a jugar a cada sitio....

7 comments:

Mario Alba said...

Pues la verdad es que suena de lo más interesante. Felicidades al General alicantino, que destruyó los ejércitos de Tarraconensis con la brutalidad que lo caracteriza. ¿Había alguna rubia en las filas enemigas? Tal vez eso le encendió la sangre al bueno de Vheto, hahaha.

Nash said...

Jajajaja nada de rubias, esas estan en el ejercito de los altos elfos, que no sabes si son elfos o elfas del aspecto tan gay que tienen. Algun dia tendrias que ir a la super tienda que habia en chatafiesta para verlo en directo.

Anonymous said...

Estoy con Fel. Suena bastante interesante. Lástima que lo más parecido a lo que haya jugado (o en principio vaya a jugar) nunca eran las batallitas que montaba con los soldaditos esos que venían en sobres. Como me pasa con WoW, prefiero morir virgen de ello. ;)

Anonymous said...

Por cierto, Nash, felicidades. Y menudo vello facial que te has dejado, ¿eh? ;)

Mario Alba said...

Ah, los sobres esos de soldados de plástico. Y los sobres sorpresa rojos con los cómics que venían dentro plegados en tres... Qué recuerdos...

Nash said...

Gracias Halagan lo mio me ha costado, es la barba de terrorista taliban que me he dejado para dar miedo a los alumnos pero no funciona muy bien.
Halanga deberias probarlos al menos una vez, pasate por una tienda de Warhammer y prueba a jugar una partida de demostración.
Yo compraba unos chicles que tenian un soldado amarillo, y jugabamos a ponerlos en tricheras o entre rocas y palos y lanzar piedras si se tumbaban es que morian... ahora los chavales juegan al couter o similares.

Anonymous said...

Si yo probaría eso del Warhammer bien a gusto, pero como ya dije, soy altamente influenciable, y fijo que lo pruebo, y me pico, y acabo gastándome los ahorros en figuritas y Rebeca me echa de casa y termino pidiendo a la entrada del Gadis para poder pagarme el vicio.

Si es que me temo mucho.