Me gusta leer y ver la tele

Wednesday, February 04, 2009

Three Thors

I've found myself reading a bunch of Thor comic books recently. I don't think I had ever read anything starring the Norse God of Thunder, and a friend of mine let me borrow three different graphic novels.

The first one, Avengers Disassembled: Thor, collects the Ragnarok storyline that put an end to the Thor ongoing series a few years ago. Both my friend and lots of other fans had raved about how cool Ragnarok was, so I thought I'd check it out. And I didn't quite like it. The problem was that Michael Avon-Oeming's writing was sort of cheesy, and his "epic" narrative was actually sort of lame and expository. The idea behind Ragnarok, the end of days for the Norse gods is really cool, but Oeming's take on it is just a succession of battle after battle after battle that left me indifferent. Which is exactly how the generic-looking artwork by Andrea DiVito made me feel. I just couldn't care about what was going on.

Somewhat dispirited, I moved on to the first volume of the new Thor series, and what a pleasant surprise it turned out to be. The script by J. Michael Straczynski is crisp, the dialogue good, Thor's quest compelling. And Olivier Coipiel's artwork is great. In this book, Thor actually looks like a Norse god instead of a generic blonde dude with a winged helmet and a silly hammer. His Thor is regal, imposing, and tough as nails. He is an enemy I would fear and an ally I would treasure.

The third collection I read was the Secret Invasion tie-in, a series that reverted to the Ragnarok story in terms of quality. The story by Matt Fraction is nothing but three issues of people punching each other, and I find that boring. As a matter of fact, it's been a decade since I grew tired of superheroes beating up supervillains, or the other way round. I haven't read the main Secret Invasion series, but it's hard to imagine how this Thor tie-in has any relevance at all. At least, Doug Braithwaite's artwork was good, so, in that regard, it was better than Ragnarok.

To sum it up, if you're interested in reading something starring the God of Thunder, by all means check out the ongoing series. If, on the other hand, you like people hitting each other, then I guess you can try one of the other books. It's your money, pal.

8 comments:

Nash said...

Thor, superman o hulk son superheroes que nunca me han llamado mucho la atención ya que no pueden morir, lo que mola de spiderman o batman o cualquier otro super más normalito es que reciben por todos los lados y siempre cabe la posibilidad que mueran, aunque despues les resuciten o sean o clon o yo que se que me invento.

Mario Alba said...

La verdad es que la práctica totalidad de personajes es, a efectos prácticos, inmortal. Los que no son dioses o imposibles de matar siempre acaban volviendo de un modo u otro. De un tiempo a esta parte, la pregunta no es ¿de verdad ha muerto?, sino ¿cuándo resucitará? Una lástima, la verdad. Por un lado, comprndo que quieran conservar sus propiedades intelectuales para seguir exprimiéndolas, pero la cosa ha llegado a extremos ridículos. ¿Por qué no dejar descansar a ciertos personajes y crear otros nuevos?

Nash said...

Que los heroes envejezcan, que crezcan los jovenes mutante y que tomen el relevo, no puede ser que siempre sean los mismos superheroes. Que spiderman tenga un hijo y que se meta en follones en el instituto....joder si se pueden hacer mil ideas.

Mario Alba said...

Tienen miedo de los cambios. Como se dice en las teleseries, al final de cada episodio las cosas deben quedar como estaban al principio.

Anonymous said...

Bien dicho, Fel: hay miedo al cambio. Y sobre todo ganas de hacer dinero por parte de las editoriales, lo que supongo que es normal. Si un personaje funciona, ¿para qué deshacerse de él?

Pero vamos, yo no soy lector de cómics de superhéroes, pero me cuesta mucho pensar que aún quedan historias interesantes que exprimirle a Superman o a Spiderman. Aunque al menos que haya tantísimos guionistas y dibujantes aportando al personaje ayuda a que sea así.

En resumen, que no tengo ni idea.

Mario Alba said...

Hahaha. Gran disquisición, Hal.

Yo tampoco leo muchos comics de superhéroes, y aunque sí es verdad que hay guionistas que aportan elementos nuevos y/o interesantes respetando la continuidad, muchas veces se recurre al despreciable y sucio truco del retcon mediante el cual años y años de continuidad desaparecen como si nunca hubieran existido. El más sangrante y reciente ejemplo: el arco One More Day en Spiderman, en el que por obra y gracia de la cara dura y la incompetencia, Peter Parker no es que ya no esté casado con Mary Jane, sino que nunca lo estuvo. La "justificación" de Quesada, el jefe de Marvel, fue que "era difícil contar historias interesantes con un superhéroe casado", algo que, curiosamente, llevaban haciendo desde hacía ni se sabe cuántos años. Es de todos sabido que Quesada odiaba el matrimonio Parker/Watson, pero en vez de buscar nuevas ideas o incluso hacer que se divorciaran (que podría haber sido interesante), se recurrió a la magia y ¡puff! El matrimonio jamás existió. Quesada dijo que así podían contar historias emocionantes de Peter Parker soltero, claro. Y lo más gracioso de todo: que hace años ya que existe la serie Ultimate Spiderman que se creó, precisamente, para tener un Spiderman soltero que no estuviera atado a las décadas de continuidad del personaje y que permitiera que nuevos lectores compraran el título sin tener que ser expertos en historia arácnida. "Irónico" se queda corto.

Anonymous said...

Pues vaya una vergüenza, la verdad. Como bien dices, una potencial separación daría mucho juego para contar "historias interesantes". No hace falta matar a ningún personaje y luego resucitarlo, como no hace falta tampoco hacer de MJ un personaje odiado.

Por cierto, ¿a qué ritmo envejecen los personajes de la Marvel? ¿O siguen hoy teniendo la misma edad que hace cuarenta años?

Mario Alba said...

Creo que hay una regla no escrita que dice que cuatro años en el universo Marvel equivalen a uno en la realidad, o algo así. Sin embargo, hay docenas de ejemplos en las que esto no se cumple. Básicamente, los personajes son "atemporales" a no ser que al guionista le interese lo contrario. Por ejemplo, todas las recientes apariciones de Barack Obama en los comics de Marvel. Obviamente, eso situaría el universo Marvel en enero de 2009, con todos los años transcurridos desde que los personajes aparecieron por primera vez hasta ahora. Sin embargo, no es así. Y es que el tiempo es relativo ;)