Ayer saltó la noticia: Disney ha cerrado LucasArts, despedido a todo el personal, y cancelado los juegos que tenían en desarrollo. Los detalles podéis verlos aquí y aquí, pero la razón principal viene a ser que Disney no quiere mantener una división independiente de videojuegos, sino que prefiere autorizar a otras compañías de videojuegos a que usen la licencia para así conseguir un catálogo de juegos de mayor variedad y calidad. Y la verdad es que tiene sentido. No me malinterpretéis: voy a ser el primero en llorar y lamentar la desaparición de una de las compañías de videojuegos más insignes y adoradas de mi adolescencia, cuando, hace veinte años, se llamaba Lucasfilm Games, pero esa compañía no es la misma que Disney ha cerrado.
Siempre que pienso en la LucasArts de hace veinte años no puedo evitar sino sonreír. ¿Quién no disfrutó de sus revolucionarias aventuras gráficas? Todavía puedo recitar todas las que me pasé, algunas múltiples veces: Maniac Mansion, Indiana Jones and the Last Crusade, The Secret of Monkey Island, Loom, y The Secret of Monkey Island 2. Y las otras a las que no pude jugar porque mi ordenador no daba más de sí: Indiana Jones and the Fate of Atlantis, Day of the Tentacle, Sam & Max, The Dig, Full Throttle, y Grim Fandango. O The Curse of Monkey Island y Escape from Monkey Island, que disfruté hace tan sólo unos años en mi primer portátil.
Entre aventura y aventura, LucasArts lanzó varios simuladores de combate espacial basados en Star Wars (X-Wing, TIE Fighter), que, pese a que a mí no me interesaron demasiado (andaba ocupado jugando a un extraño juego suyo llamado Night Shift en el que tenías que operar una máquina que hacía figuritas de los personajes de Star Wars, Indiana Jones, y creo que hasta Maniac Mansion), fueron un éxito absoluto de crítica y público. El auge de estos juegos combinado con la pérdida de popularidad de las aventuras gráficas impulsó a la compañía a concentrarse casi exclusivamente en juegos basados en el universo Star Wars, y fue entonces cuando, por desgracia, empecé a perder interés en LucasArts. (Ya no digamos cuando la mayoría de dichos juegos pasó a estar ambientado en las precuelas.)
Desafortunadamente, una compañía que había sido conocida por la originalidad y calidad de sus juegos degeneró rápidamente en una máquina de ensamblar juegos de Star Wars de calidad y méritos más que discutibles, y así llegó hasta donde se encontraba actualmente: un lugar en el panorama del entretenimiento electrónico que yo, personalmente, hacía años que no visitaba. ¿Dónde estaba la LucasArts de mi adolescencia, la LucasArts que echo y echaré de menos? Esa compañía hace años que desapareció, lo que explica que me haya quedado igual tras leer la noticia del cierre de LucasArts. La defunción de la compañía tuvo lugar hace más de una década, y desde entonces la he venido añorando. Esta segunda muerte, qué queréis que os diga, me deja algo indiferente.
Con algo de suerte, Star Wars 1313, el juego que estaban desarrollando que admito tenía una pinta fantástica, encontrará un estudio que lo termine y lo publique (aunque parece que las posibilidades son más bien nulas), y otras compañías seguirán lanzando buenos juegos basados en el universo creado por George Lucas, pero lo que realmente me gustaría es que alguien comprara los derechos de Maniac Mansion o Monkey Island (o que se los cedan a Gilbert, que para algo los creó, y que opina sobre el tema aquí) o o Indiana Jones, y que hicieran juegos magníficos con estas propiedades intelectuales. El mono con tres cabezas bien lo merece.
(Photo credit: Kotaku)
10 comments:
Pues que quieres que te diga yo hubiese hecho justo lo contrario. Si tengo una empresa buena de desarrollo de video juegos hubise dado todas mis licencias a dicha empresa, piensa que ahora los videojuegos dan más pasta que las peliculas. Realmente una pena.
Creo que la palabra clave es "buena", ya que, en mi opinión, hace tiempo que LucasArts dejó de ser una buena empresa de desarrollo de videojuegos. No es que quiera dármelas de economista o empresario, pero tiene sentido que Disney quiera ahorrarse tener que pagar a una plantilla de 50 ó 60 empleados de la división de videojuegos cuando lo que puede hacer es esperar a que alguna compañía independiente les diga que quiere hacer un juego de SW y les pague una fortuna para poder usar la licencia: no sólo Disney no tiene que pagar dinero al equipo que desarrollará el juego, sino que la misma compañía les va a dar dinero para poder desarrollarlo. Y como dije en Facebook anoche, compañías como Traveler's Tales y Bioware han hecho mejores juegos de SW que LucasArts, así que, en mi opinión, el cierre de la empresa tiene sentido.
Y eso de que los videojuegos dan más dinero que las películas es más que discutible, pues depende de la película, del juego, y del presupuesto de ambos. Los videojuegos que venden millones de unidades cuestan también millones en desarrollo, así que cuál de los dos medios gana más dinero está abierto a debate.
Buena argumentación, serias un buen empresarios sin escrúpulos.
¡Gracias!
De acuerdo que hace siglos que LucasArts no nos da un juego bueno, pero aún así no puedo evitar estar de luto.
A ver si aprovechan ahora y sacan un megapack con todas las aventuras gráficas que hicieron. Tengo unas ganas horribles de jugar otra vez, y no tengo físicamente más que Sam & Max, Fate of Atlantis, Day of the Tentacle y... creo que Last Crusade.
Deberían hacer un HD remastering de todos esos juegos, y añadir Loom, Grim Fandango y alguna más. Si os interesa, las ediciones especiales en HD de los dos primeros Monkey Island están disponibles para PC y iPad :)
Y Full Throttle y Zakk MacKraken. Y el tercer y cuarto Monkey Island. Nunca jugué a ningun de éstos, pero ya que estamos quiero el pack completo. Incluso Legend, aquella primera aventura que hicieron basada en la película homónima. Me aguantaré mientras las ganas de coger las reediciones de los dos primeros MI.
Zak McKracken. Estaba claro que iba a escribir mal el nombre...
El tercero es hilarante! Me encanta sobre todo el estilo de dibujos animados que tiene, que lo hace atemporal.
Post a Comment