Me gusta leer y ver la tele

Thursday, January 22, 2015

Todo menos dejarlo en paz

La primera película que Crystal y yo hemos ido al cine a ver este año es Taken 3, la tercera entrega de las aventuras de Bryan Mills, interpretado como siempre por Liam Neeson. En esta ocasión, y tal y como se muestra en el mismo tráiler, alguien asesina a la ex-mujer (Famke Janssen) del señor Mills y lo arregla todo para que parezca que ha sido él, con lo que el carismático personaje se ve metido en una carrera contrarreloj para escapar de la policía y encontrar a los verdaderos responsables.

Sin ser nada del otro mundo, Taken 3 es una película de lo más entretenida, y tanto a Crystal como a mí nos gustó bastante (y más que la segunda). Liam Neeson vuelve a ser más duro que nadie y les da las suyas y las de un bombero a todos los que se cruzan en su camino, y sobrevive a varios encuentros con la muerte en los que a otra persona normal habría sin duda perecido. Como ya sé a lo que voy, esto no me parece mal, aunque debo decir que hay una escena en particular que me hizo enfadar un tanto. A la media hora de haber empezado la película, Liam Neeson se ve envuelto en una persecución en coche en la que acaba en un garaje, rodeado de coches de policía. Ni corto ni perezoso, Neeson echa marcha atrás, derriba la verja que cubre la puerta del ascensor, y el coche (con él dentro) cae por el hueco del mismo y explota. Obviamente, es imposible que alguien sobreviva a este suceso, pero sabemos también que es imposible que Liam Neeson vaya a morir al poco de empezar la película. En la siguiente escena, vemos a Neeson hablando por teléfono tranquilamente, habiendo claramente escapado del siniestro, pero... ¿cómo lo hizo? Nadie lo sabe, ya que ni se explica ni se muestra ni se vuelve a mencionar el incidente durante el resto de la película. Sería cosa de magia. Como ya he dicho, en este tipo de película espero que el protagonista escape de situaciones límite, pero al menos quiero que no me tomen el pelo, que me respeten un poquito y que me cuenten una mentira transparente pero plausible que me muestre cómo ha podido escapar. Al menos, esto no vuelve a pasar en el resto del film, y cada vez que Neeson nos deslumbra con hazañas y virguerías, todo está explicado.

Con todo y con eso, Taken 3 nos resultó de lo más amena, y sin duda os la recomiendo para pasar un rato entretenido en el cine. A fin de cuentas, Liam Neeson aniquilando a los malos de turno siempre es una receta para pasárselo bien, ¿verdad?

2 comments:

Nash said...

El otro día vimos Reme y yo la primera, mira que es buena. Tengo que ver la segunda y esta tercera parte por que como dices es una delicia ver a Liam repartiendo por todas partes, aunque eso de que maten a Framke me ha dolido...
Coincido contigo en que no cuesta nada hacer las cosas bien y no sacar al héroe de situaciones imposibles con una cortinilla en negro y salir caminando por otro lado. Supongo que rodarían la escena y luego no se les ocurrió como sacarlo

Mario Alba said...

La primera es la mejor, y con diferencia, pero las secuelas no están mal, especialmente ésta.

Y sí: me pregunto qué demonios pasó con la explicación de esta escena. Tal vez estaba en el guión original, y puede que incluso se rodara, pero luego acabaron dejándola fuera del montaje final. Quién sabe...