Tortuga mutante

Aquí tenéis un monstruito que dibujé el otro día. Empecé sin saber muy bien qué iba a dibujar, pero pocas rayas después de haber empezado la cabeza de la criatura me di cuenta de que estaba dibujando algún tipo de tortuga mutante. Sabiendo esto, le puse un caparazón a la espalda, y le di extremidades que ya querría para sí cualquier quelonio.

El garabato no me llevó más de unos veinte minutos, y me lo pasé en grande siguiendo a mi lápiz y viendo dónde me llevaba, lo que me hace pensar que tengo que encontrar tiempo para hacer este ejercicio tanto como pueda. ¡Espero que os guste!

La vida sigue

Tras releerme los tres primeros volúmenes de Saga, que ya leí el año pasado, me puse con el cuarto, y hay que ver lo buena que sigue siendo esta serie escrita por Brian K. Vaughan e ilustrada por Fiona Staples.

Este cuarto tomo comienza varios meses después del final del tercero, y Hope, la hija de Alana y Marko está algo más crecidita. Su vida ya no parece correr peligro inmediato, pero la relación de sus padres, por el contrario, sufre varios ataques de distinto tipo y naturaleza que hacen que el tomo termine con un cliffhanger de órdago. ¡Ansioso espero a que se publique el quinto!

El retorno de Struzan

Regocijémonos todos ante el retorno del gran Drew Struzan, que ha suspendido su jubilación momentáneamente para regalarnos este fantástico poster the The Force Awakens. Siguiendo la tradición que comenzó con el estreno de las ediciones especiales de la trilogía clásica, y que continuó con las denostadas precuelas, el magnífico Struzan vuelve a esta galaxia tan lejana para retratar a los que me imagino deben ser los principales protagonistas de este séptimo episodio, que se estrena el dieciocho de diciembre. (Digo "me imagino" porque lo único que sé de la película es lo que he visto en los dos trailers que nos han enseñado hasta la fecha.)

Pese a que me imaginaba que alguien iba a convencer a Struzan para que ilustrara este poster (así como los de las próximas películas, espero), debo decir que la ilustración en sí me ha sorprendido bastante. Por un lado, podemos disfrutar de los típicos colores a los que el artista nos tiene acostumbrados: esos naranjas y amarillos cálidos que irradian luminosidad; esos azules violáceos que contrastan con la calidez anteriormente mencionada y que enfrían y oscurecen los elementos que los contienen. Por otro, Struzan vuelve una vez más a deleitarnos con unos retratos acertadísimos de los actores, que casi parecen fotografías dado el increíble grado de realismo que el artista es capaz de lograr. Sin embargo, es la composición de la imagen lo que me ha pillado totalmente por sorpresa, y lo que, en mi opinión, le da un carácter y una personalidad propias que la distinguen de sus seis predecesoras. No tenéis más que buscar los otros posters en Google para ver que sus elementos principales son las caras de los distintos personajes, y eso es lo que me esperaba de este nuevo. De hecho, si volvéis a Google y buscáis posters de The Force Awakens, veréis que los aficionados han hecho una multitud de posters para la película inspirados en el arte de Drew Struzan, y que todos ellos presentan una composición similar a la de The Phantom Menace o Attack of the Clones. Qué grata sorpresa, pues, que Struzan haya decidido hacer algo completamente diferente y utilizar esta composición vertical/diagonal que muestra a los protagonistas de cuerpo entero (casi) y ofrece así un ángulo diferente al que estamos acostumbrados. (¿Veis qué astuto? Nos muestra un ángulo diferente literalmente, del mismo modo que J.J. Abrams y su equipo aportan un ángulo diferente al universo Star Wars.)

Por si no os ha quedado claro, esta ilustración me ha encantado, y espero que la película que retrata sea igualmente magnífica. La respuesta, en cuatro meses.

El rey león

Si no conocéis al artista chino Hua Tunan, no sabéis lo que os estáis perdiendo. Si buscáis imágenes de sus pinturas en Google, encontraréis una colección de animales tanto o más impresionantes que este búho que he escogido para ilustrar esta entrada. Y si queréis ver al artista pintando un león en una pared, no tenéis más que ver el vídeo adjunto. ¡Espero que lo disfrutéis!

Foshan Lion Head | Chen Yingjie x NeochaEDGE /// from Neocha on Vimeo.

Cuervos

Aquí tenéis unos bocetos que hice el otro día. Supongo que tanto ver pájaros en el porche me inspiró, y se me ocurrió dibujar unos cuervos para pasar el rato. ¡Espero que os gusten!

Los peligros de la bibliofilia

Finders Keepers es el segundo libro de la trilogía que comenzó con el fantástico Mr. Mercedes, que ya alabé el año pasado. En esta ocasión, el gran Stephen King nos regala la historia de un criminal que asesina a un famoso escritor y le roba decenas de manuscritos inéditos que no puede leer al ser encarcelado por otro delito diferente. Los más de treinta años que se pasa recluido se le hacen más llevaderos al saber que los manuscritos los dejó bien escondidos y enterrados bajo un árbol cerca de donde vivía y que podrá leerlos al salir, con lo que os podéis hacer cargo de la que se arma cuando por fin sale de la cárcel y descubre que alguien ha desenterrado su tesoro. Y hasta aquí puedo leer.

La mitad del reparto de Finders Keepers lo componen los protagonistas de Mr. Mercedes, que aunque no es necesario para comprender lo que pasa en Finders Keepers, os quedará completamente destripado por los mismos personajes si no lo habéis leído antes, con lo que recomiendo que lo degustéis antes de poneros con éste. Afortunadamente para vosotros, ambos son fantásticos, con lo que saldréis ganando si leéis los dos.

Como ya pasaba con Mr. Mercedes, esta novela no es de terror, sino un thriller de lo más intenso que te obliga a seguir leyendo y seguir pasando páginas cuando, después de varias horas haciendo lo propio, te duelen los ojos y tienes la vista cansada, pero tienes que seguir leyendo. ¿Verdad que es una sensación impagable cuando pasa? Pues en Finders Keepers pasa. ¡Cinco estrellas bibliófilas!

Cocineros espaciales

Wonton Soup: The Collected Edition recoge los dos tomos recopilatorios de Wonton Soup en un volumen más grueso que las Páginas Amarillas. Escrito e ilustrado por el canadiense James Stokoe, Wonton Soup narra las andanzas de Johnny Boyo y Deacon Vans, dos camioneros espaciales que se dedican a recorrer la galaxia haciendo el ganso.

En la primera mitad del volumen, descubrimos que Johnny Boyo es un aprendiz de cocinero, y cuando regresa al planeta donde se halla ubicada la escuela culinaria en la que es legendario, dos gemelos cocineros lo retan a un duelo culinario para determinar quién es el mejor chef. En la segunda, Deacon Vans relata su pasado como granjero de "osos amorosos", y de cómo una compañía de productos afrodisíacos acabó arruinándolo y obligándolo a convertirse en camionero espacial.

Como podéis ver, las historias en Wonton Soup son más bien tirando a esperpénticas y rocambolescas,  y se leen con rapidez, agrado, y una sonrisa en los labios. En lo que a los dibujos se refiere, esta serie precede a la estupenda Orc Stain, y se nota que Stokoe estaba empezando a desarrollarse como artista, con lo que no puedo decir que las ilustraciones me hayan deslumbrado. Aun así, para pasar un buen rato, Wonton Soup es de lo más entretenida y original, y si os gustan los comics underground, seguro que os encantará.

Asesino silencioso

Con Hitman Absolution he tenido una relación algo peculiar. Me hice con el juego en otoño de 2013 porque tenía una pinta fantástica: los gráficos eran magníficos, y las escenas que había visto en Internet con docenas de personajes en pantalla me habían dejado con la boca abierta. Tenía, sin embargo, algo de miedo, ya que sabía que era un juego de sigilo y sutileza, y mi único contacto con esa mecánica se limitaba a las distintas misiones de Assassin's Creed que requerían infiltrarse en algún lugar sin ser detectado. Aparte de eso, jamás había jugado a ningún juego de sigilo y, ni qué decir tiene, a ninguno de los cuatro cuatro juegos de la serie Hitman que preceden a este Absolution. Pero como me llamaba la atención, era algo diferente a lo que suelo jugar, y estaba de oferta, me lo compré y me puse a jugar. El juego me pareció interesante, pero la frustración fue escalando poco a poco, y a mitad de la quinta misión (de veinte), saqué el disco de la consola y volví a poner la caja en la estantería, dispuesto a olvidarme de su existencia.

Un año y medio después, durante este verano de 2015 del que no nos queda más que un mes, jugué a The Evil Within, con sus momentos de sigilo, y luego continué con su expansión, The Assignment, que se basa completamente en esta mecánica... y ambos me encantaron. Fue entonces cuando me planteé volver a Absolution, a ver qué pasaba; y lo que pasó fue que me encantó.

En Hitman Absolution el jugador controla al Agente 47, un asesino letal especializado en eliminar a sus objetivos con un sigilo tal que nadie sabe siquiera que estuvo allí. Por motivos que no desvelaré, al principio del juego 47 salva a una adolescente que posteriormente es secuestrada, lo que lleva a 47 a embarcarse en su búsqueda a lo largo y ancho de los Estados Unidos, y a dejar decenas de cadáveres a su paso.

Cada una de las veinte misiones tiene lugar en distintos escenarios, todos ellos construidos con cuidado y esmero y creados con una paleta de colores que, unida a la fantástica iluminación del juego, les otorgan una belleza difícil de explicar. En general, en cada misión hay que asesinar al menos a un objetivo (o más de uno en muchos casos), y aquí es donde Hitman Absolution se luce de verdad, pues 47 tiene una libertad inusitada para mandar a los malvados al otro barrio. Dado que se trata de un juego de sigilo y sutileza, acercarse al objetivo y coserlo a balazos suele acabar desastrosamente la mayoría de veces, con lo que 47 tiene que encontrar otras maneras de finiquitar a los facinerosos, y cada nivel ofrece una variedad increíble de posibilidades. Por ejemplo, 47 puede hacerse con rifles de francotirador y liquidar a sus víctimas a cientos de metros de distancia; o puede hacer que las muertes parezcan accidentes gracias a cables en lugares estratégicos, venenos administrados en el momento preciso, botellas de salsa de barbacoa que realmente contienen gasolina, lamentables escapes de gas, o túneles que tristemente se han desmoronado.

También puede encontrar la forma de evadir a los guardaespaldas de sus objetivos y cepillárselos por la espalda gracias a conductos de ventilación en el lugar adecuado, cornisas convenientes, o ventanas que alguien se dejó abiertas. Y eso por no hablar de las decenas de disfraces con los que 47 puede hacerse para pasar desapercibido e infiltrarse en las guaridas de los malhechores. Todo esto es posible en la práctica totalidad de los niveles, y es explorando la zona y exprimiéndose lo sesos que el jugador va descubriendo las posibilidades en cada nivel, y cómo le puede resultar más fácil (o más atractivo) darle el pasaporte a su objetivo. ¿Veneno en el sushi? ¿Un ventilador que se desploma del techo? ¿Un cuchillo lanzado en el momento oportuno? ¿La luz que se va en el momento más inesperado? La infinidad de recursos que ofrece el juego hacen que sea una delicia enfrentarse a cada reto particular, y que el jugador se sienta tremendamente satisfecho cuando sus planes salen bien.

Tantas posibilidades para tener éxito no quieren decir que el juego sea fácil en absoluto. De hecho, más de una vez tuve que dejar de jugar cuando la frustración me impedía seguir jugando porque los malditos guardias apostados en todos los recovecos posibles acababan viéndome y dejándome como un colador (y eso que me pasé el juego en el segundo de cinco niveles de dificultad). Por más que me agazapaba, me agachaba, me escondía, y hacía todo lo posible para desaparecer entre las sombras (o dentro de un armario, o en la cesta de la ropa sucia, o incluso dentro de una armadura de samurai expuesta en una vitrina), las más de las veces alguien me veía y tenía que escabullirme como podía, o liarme a balazos, lo que solía acabar con el pobre 47 tendido en el suelo y bien agujereado. Pero perseveré, y acabé triunfando. Eso sí: sutileza, anonimato e invisibilidad no puedo decir que estuvieran presentes en la mayoría de mis asesinatos. Hice lo que pude, y viví para contarlo.

Ya he dicho que los gráficos son magníficos, y tanto la animación como las voces de los actores y actrices hacen que los personajes parezcan reales como la vida misma. La música y los efectos de sonido acompañan a la acción perfectamente, y el conjunto resulta un juego altamente recomendable. Además, dado que nunca había jugado a un juego como éste, Hitman Absolution me resultó original, sorprendente, y un soplo de aire fresco. De hecho, tras terminarlo empecé a jugar a Assassin's Creed Rogue, y en más de una ocasión me sorprendí pensando que ojalá pudiera disfrazarme para colarme en el recinto de turno, tal y como se puede hacer en Absolution. Pero vamos: si queréis probar un juego en el que hay que ser sigiloso y estudiar las pautas de comportamiento de los enemigos para evitarlos en vez de plantarse delante de ellos y coserlos a balazos, Hitman Absolution os encantará. ¡Cinco estrellas silenciosas!

PD: Por cierto, Hitman: Agent 47, la segunda película basada en la franquicia, se estrena el próximo viernes, con lo que esta entrada no podría haberse publicado en mejor momento. Por si no lo habéis visto, aquí tenéis el tráiler.

Uve doble

Kinsey Millhone vuelve a la carga en W is for Wasted, la vigesimotercera novela de la serie escrita por Sue Grafton a la que pocos libros le quedan ya. En esta ocasión, la incombustible Kinsey se ve metida en un lío familiar con ramificaciones inesperadas que la llevan a investigar la muerte de un detective privado y el mundo de la investigación científica para el desarrollo de fármacos.

Como siempre, el misterio resulta interesante e impredecible, pero es la forma en que Kinsey narra el caso, así como la personalidad de la detective privada, lo que hace que la novela sea tan amena y se disfrute tanto como las veintidós entregas previas. Si no habéis leído nunca uno de estos misterios alfabéticos, os recomiendo que empecéis por el principio y que comencéis a conocer a Kinsey sin perder ni un minuto más. ¡Altamente recomendable!

Robotillo corredor

Aquí tenéis un dibujillo rápido que hice el otro día. El simpático personaje no sé si tiene nombre, pero es la mascota de la Oatley Academy, una escuela online para artistas visuales en la llevo matriculado varios meses. El garabato no me llevó más de unos minutos, y pintarlo con colores de madera me costó otros tantos. ¡Espero que os guste!

Regalito inesperado

El jueves pasado, Crystal y yo fuimos al estreno de The Gift, una película escrita y dirigida por Joel Edgerton, y protagonizada por Jason Bateman, Rebecca Hall, y el mismo Edgerton.
The Gift comienza con Simon y Robyn (Bateman y Hall) mudándose por motivos de trabajo a la ciudad donde Simon creció. Al poco de comprar una casa, Simon y Robyn se topan con Gordo (Edgerton), un antiguo compañero de instituto de Simon que tiene que hacerle memoria al protagonista para que lo recuerde. Al día siguiente, el primer regalo de bienvenida aparece en la puerta de la pareja, que no tiene más remedio que agradecerle a Gordo el detalle. Sin embargo, ahí no acaba la cosa, ya que más y más regalos van apareciendo, y Gordo insiste en dejarse caer cuando Simon está trabajando y Robyn está sola en casa. Gordo, por si no os habéis dado cuenta todavía, es un tipo de lo más raro, y Simon se ve obligado a dejarle bien claro que esta extraña relación debe terminar... y hasta aquí puedo leer.

Tanto a Crystal como a mí nos encantó la película, que resulta tensa e inquietante de principio a fin, y nos gustó ver a Jason Bateman en un papel distinto al que nos tiene acostumbrados. Tanto Bateman como el resto del reparto hacen un papel excelente y añaden credibilidad y verosimilitud a una historia que parece real como la vida misma, lo que la hace aún más inquietante. Obviamente, no voy a destripar nada, pero si os apetece ver un thriller psicológico bien hecho y mejor llevado, os recomiendo que abráis este Regalo y veáis qué os aguarda en su interior. ¡Altamente recomendable!

Persiguiendo ovejas desesperadamente

A Wild Sheep Chase es una entretenida novela escrita por Haruki Murakami y traducida al inglés por Alfred Birnbaum. El libro está narrado por un japonés de treinta años que nunca revela su nombre, y cuenta la surrealista aventura en la que se ve inmerso poco después de publicar una foto hecha por un amigo suyo. En la citada fotografía se puede ver un rebaño de ovejas de lo más normal, excepto por una de ellas, que tiene una estrella tatuada en el culo. Al verla, el secretario de un misterioso y rico individuo se pone en contacto con el protagonista para pedirle que encuentre a la extraordinaria oveja, y así empieza una estrafalaria aventura que lo lleva desde Tokyo a Hokkaido en busca de la oveja perdida.

Si el argumento os suena un tanto extraño, es porque lo es, y el hecho de que no se dé el nombre de ningún personaje en la historia no hace sino añadir un poco más de excentricidad al ya de por sí extravagante conjunto. En general, A Wild Sheep Chase es entretenida y se lee con rapidez, pero debo decir que me esperaba algo más surreal y divertido de lo que me encontré, y eso que la novela es bien rara y surrealista, y me hizo reír en más de una ocasión. Recomendable para los que busquen algo diferente a lo que suelen leer, y para los que estén interesados en cosas raras y distintos tipos de ovejas. Los demás, mejor abstenerse.

Rarezas de la vida

Life is Strange es un juego episódico en el que, como en The Walking Dead de TellTale Games, las decisiones que se toman afectan al desarrollo de la historia. En este juego del palindrómico Dontnod Entertainment, la acción está protagonizada por Max Caulfield, una chica en su último año en el instituto que regresa al pueblo de su infancia para ir a una escuela privada en la que un famoso fotógrafo da clases. Como Max quiere ser fotógrafa y no va a ningún sitio sin su cámara, la joven está emocionadísima por poder aprender de este hombre, y es con gran entusiasmo que empieza el semestre. Rápidamente, y como ya os podréis imaginar, las cosas comienzan a tomar giros inesperados con la desaparición de una joven, el sospechoso y elitista Club Vórtice, y el sorprendente descubrimiento de que Max puede "rebobinar" el tiempo para cambiar acciones y sucesos del pasado reciente. Curioso, ¿verdad?

Life is Strange es una aventura en la que hay que explorar, hablar con los otros personajes, y resolver puzzles no muy complejos para seguir avanzando y profundizando en la interesante historia que se nos presenta. Este primer episodio de cinco dura unas tres horas, y sirve para presentarnos al reparto, pintarnos el escenario, e introducir las distintas tramas que claramente va a ir entrelazándose y complicándose a lo largo del resto de entregas. Dichas tramas me han parecido de lo más interesantes, lo que unido a una factura técnica intachable, unos personajes atractivos y realistas, y unas voces fantásticas, hacen que tenga ganas ya de hacerme con el segundo episodio para ver qué pasa a continuación, especialmente sabiendo cómo terminan las cosas en este primero.

En resumen: si os apetece probar una aventura gráfica facilita, de ritmo lento y relajado, con una historia de instituto con tintes sobrenaturales y de misterio, Life is Strange es una buena elección. ¡Según vaya jugando más, ya os iré contando qué pasa!

El jovencito y Frankenstein

Revival se publicó el noviembre pasado, y llevaba queriendo leerlo desde que Crystal me lo regalara para mi cumpleaños. Bueno, la verdad es que llevaba queriendo leerlo desde que se anunció, pero ya sabéis que soy gran fan de Stephen King, y que adquiero y devoro sus libros con una pasión que reservo para pocas cosas.

En esta ocasión, el Rey de Maine nos cuenta la historia de Jamie Morton, y de cómo su camino se entrecruza con el de Charles Daniel Jacobs, un hombre que empieza como pastor, se convierte en feriante, y pasa a ser varias cosas más que no destripo. Jacobs está obsesionado con la electricidad, y lo que en principio comienza como un pasatiempo inofensivo termina convirtiéndose en algo con consecuencias a nivel global. El mismo Jamie sufre varios cambios a lo largo de su vida también, y según lo vamos acompañando a través de los años desde su infancia hasta su madurez, su relación con Jacobs se va haciendo más evidente, hasta que llegamos al desenlace y somos testigos de adónde caen los escombros tras la metafórica e inevitable explosión.

Pese a que Revival me ha gustado y la he leído de principio a fin con rapidez y agrado, debo decir que  esta novela no me ha parecido una de las mejores de mi querido Stephen King. Los personajes son interesantes y resultan reales como la vida misma, pero la historia en general me ha dejado un poco indiferente y no me ha parecido ni tan tensa ni tan bien hilvanada como las de previas novelas del de Maine. El libro tiene cuatrocientas páginas, pero bien podría tener la mitad o el doble, ya que tanto podría habernos contado más sobre la vida de Jamie como menos, y me habría quedado con la misma sensación de pointlessness, de no saber muy bien para qué me han contado lo que he leído. Dicho eso, debo insistir en que Revival tiene varios puntos a su favor (grandes personajes, un regusto nostálgico tremendamente logrado), y que me ha gustado, pero poco más. Tratándose de un libro de Stephen King, esperaba un resultado muy diferente, pero ni siquiera él es infalible (a Hearts in Atlantis o From a Buick 8 me remito). ¡Esperemos que Finders Keepers, que salió en junio y que por supuesto ya tengo en mi estantería, me satisfaga mucho más!

Un par de criaturas

Como bien indica el título de esta entrada, aquí tenéis un par de criaturas que dibujé el otro día. Obviamente, no son más que bocetos medio garabateados sin demasiada complicación, y aunque los hice por la mañana, les voy a colocar la etiqueta de bocetos nocturnos dado el similar espíritu que comparten con los rayajos pertenecientes a dicha serie. ¡Espero que os gusten!