Con este libro me he llevado una enorme sorpresa, ya que lo que menos me
gusta de Warhammer 40000 es su historia:
eso de los dioses del caos todopoderosos que no paran de mandar hordas
demoníacas o convertir a los pobres humanos en seres repulsivos sin conciencia que sólo quieren matar a todo lo que se mueva no me atrae mucho. Pero estas Navidades vi en una oferta de 8 libros de la saga a muy buen precio, y decidí pedírselos a los Reyes Magos.
Los primeros de Tanith, escrito por Dab Abnett, cuenta las peripecias para intentar sobrevivir del
primer y único regimiento de infantería de Tanith, siendo Tanith mundo imperial
que fue desolado por el caos el mismo día que sus tropas eran embarcadas para
combatir. La Guardia imperial es la base del Imperio: millones y millones de
tipos normales con una mierda de armadura corporal como defensa que cualquier
alien revienta con facilidad, y rifles láser como arma fundamental de ataque.
Además, en sus filas pueden contar con morteros, cañones de plasma, granadas,
bolters y un sinfín de vehículos que van desde jeeps hasta carros de combate
gigantes pasando por cazas y naves de transporte. En otras palabras, que estos soldados no tienen nada que ver con los marines espaciales y sus increíbles armaduras de combate: los niños mimados del emperador.
Al mando de este regimiento de la Guardia imperial está el
Coronel-Comisario Ibram Gaunt. La figura del comisario está copiada de la
antigua Unión Soviética, donde el comisario era el simpático tipo que se dedicaba a matar a sus
propias tropas para impartir disciplina y evitar deserciones o retiradas aun
cuando esto fuese lo más lógico. En este caso, el prota es un tipo duro de
cojones pero que se preocupa por sus
tropas y no los sacrifica innecesariamente.
En este primer libro, mediante flashbacks, se nos cuenta la historia del amigo Gaunt mientras se enfrenta junto a sus hombres en varias misiones no sólo a hordas traidoras del caos, sino a un complot dentro de la propia Guardia imperial. El libro está repleto de acción que además está bastante bien pensada, aunque como siempre hay algunas cosas un pelín ilógicas para un tipo tiquismiquis como yo en aspectos de estrategia. Pero, en definitiva, Los primeros de Tanith es una novela muy recomendable.
10 comments:
Jajaja. Me alegra que por fin reconozcas tu tiquismiquez en temas de lógica estratégica, Nash.
Sobre Warhammer, nunca he jugado, y confiado que no conozco nada de ese universo. ¿Surgió del juego de mesa, o fueron primero los libros?
Me ha costado pero al final he de reconocer que mejor si no pienso tanto y disfruto de los libros/peliculas sin más.
Los libros nacieron a raiz del juego, como ha pasado con muchas sagas literarias como Dragonlance que son las partidas de D&D pasadas a libros por dos de sus jugadores.
Supongo que estos libros son demasiada acción para ti pero echales un vistazo si puedes.
No sabía que Abnett hubiese escrito tantas novelas (no sólo de Warhammer), ya que sólo lo conocía como guionista de cómics en Marvel (bueno, y en DC), donde tiene buena reputación. En cuanto a Warhammer 40.000, tiemblo de pensar en el único libro de la serie que me he leído, así que no sé yo si algún día leeré otro. ¡Pero me alegro de que te haya gustado!
¿¿Cual fue?? ¿¿Tan malo fue??
Uno que se llamaba Faith & Fire. A ver si encuentro la entrada y os pongo el enlace.
Ah, ¿lo comentaste aquí? Pues ya estás poniendo un link, jajaja, que yo esto no me lo pierdo.
Encontrado está:
http://sunnyjhanna.blogspot.com/2006/07/this-years-bad-books_06.html
No me suena que este en español pero viendo lo que dices de el no tengo ninguna prisa en verlo. He mirado por internet y la saga de guant esta muy bien valorada, nada que ver con esta novela que comentas. De hecho hay gente que se lo ha currado y ha creado las minis de los personajes.
Ya me he terminado el segundo libro en breve post.
Jajaja. Gracias. La verdad es que releyendo tu post el libro no parece tan malo. Que será porque lo estás comparando con dos, por lo que tú dices, abominaciones.
Estoy de acuerdo en que tengo peor recuerdo de ese libro de lo que mis comentarios originales reflejan. Y para describir a los otros dos, "abominaciones" no es una mala palabra, jajaja.
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