De la luna a la luna

Moon es una película de 2009 protagonizada por Sam Rockwell y por la voz de Kevin Spacey. En Moon, Rockwell interpreta a Sam Bell, un tipo encargado de supervisar unas operaciones mineras en la cara oculta de la luna. Como la historia transcurre en el futuro cercano, dicha supervisión tiene lugar en una base instalada en el satélite de la Tierra, donde el bueno de Sam está contratado para permanecer por tres años, y donde no tiene más compañía que la de Gerty (Spacey), una computadora capaz de comunicarse oralmente. Cuando comienza la película, los tres años de su contrato están a punto de terminar, y Sam está de lo más contento por volver a casa para reunirse con su mujer y su hija recién nacida. Sin embargo, un pequeño accidente laboral mientras Sam opera un vehículo lunar lo lleva a hacer una serie de descubrimientos que le cambiarán la vida para siempre, y que llevan al espectador a cuestionarse todo lo que está viendo y tratar de adivinar qué derroteros va a tomar la trama.

Moon es una película de ritmo lento, pero a mí en ningún momento me pareció aburrida, sino todo lo contrario. Con cada una de las revelaciones y cada uno de los descubrimientos de Sam, mis teorías sobre lo que estaba pasando fueron cambiando y transformándose hasta llegar al final, que por supuesto no os destripo para no estropearos ninguna sorpresa. De principio a fin, Moon me pareció estupenda y original, y desde aquí os la recomiendo para haceros pasar hora y media de lo más entretenida. ¡Cuatro estrellas selenitas!