Utopía animal

El viernes pasado, Crystal y yo llevamos a nuestra sobrina Avonlea al cine a ver Zootopia, la nueva película animada de Disney que se estrenó hace un par de semanas. La historia está protagonizada por Judy Hopps (Ginnifer Goodwin), una conejita que siempre ha querido ser policía. Tras mucho esfuerzo y dedicación, la joven logra graduarse de la academia de policía, y es destinada al centro de Zootopia, una enorme metrópolis donde animales de todo tipo coexisten pacíficamente. Pero, ¿he dicho pacíficamente? Si ése es en verdad el caso, ¿por qué han desaparecido sin dejar rastro catorce mamíferos recientemente? Tras una serie de peripecias, le toca a Judy resolver el caso, para lo cual tiene un límite: 48 horas. Afortunadamente, para hacerle las cosas más llevaderas, la emprendedora conejita cuenta con la ayuda de Nick Wilde (Jason Bateman), un zorro vividor y caradura del que no se fía nadie. ¿Un zorro y una coneja trabajando juntos? ¿Cómo podría esto acabar bien?

Con la excusa de los animales antropomórficos, Zootopia explora temas como los estereotipos, el racismo, y la libertad para hacer lo que uno quiera hacer y ser lo que uno quiera ser sin que nadie lo juzgue. Estos temas, obviamente, se le pasaron por alto a mi sobrina de cuatro años, a quien lo que cautivó fue la animación preciosista, los decorados espectaculares, la iluminación magnífica, y unos personajes bien diseñados y mejor escritos. Pero los temas adultos están ahí, y acompañados de chistes, bromas y guiños a distintos grupos demográficos (los de Disney saben que los niños no van solos al cine y los padres tienen que entretenerse también), hacen que Zootopia sea una experiencia de lo más agradable para toda la familia. De hecho, Crystal, que realmente no tenía muchas ganar de ver la película (la convencí para ir a verla al decir que podíamos usar la excusa para llevar a Avonlea al cine), la disfrutó de principio a fin, y cada vez que me giraba para mirarla la veía o bien con una sonrisa de oreja a oreja, o bien riéndose a mandíbula batiente. Vamos: que Zootopia impresiona no sólo a los aficionados a la animación.

En resumen: si os apetece ver una peli agradable, divertidísima y que derrocha imaginación y creatividad por los cuatro costados, no lo dudéis y acercaos al cine más cercano a ver esta delicia animada. ¡Cinco estrellas antropomórficas!