A Year in the Life transcurre nueve años después del final de la serie, con lo que el mismo tiempo ha pasado tanto para los personajes como para los telespectadores. Cada uno de los cuatro episodios dura hora y media, con lo que son mas bien películas que episodios al uso, y cada uno transcurre en una estación diferente a lo largo de un año. Así pues, la acción comienza con Invierno y termina con Otoño, presentándonos las peripecias de los personajes a través de esos doce meses de su vida.
No os voy a destripar nada de lo que pasa, pero sí os diré que fue estupendo volver a encontrarme con Lorelai, Luke (mis favoritos), y el resto de personajes regulares de la serie, y ver cómo habían transcurrido sus vidas durante estos nueve años. Los diálogos, como siempre, son formidables, y las actuaciones (Lauren Graham es, como era de esperar, sobresaliente) son fantásticas, ya que los actores recuerdan exactamente cómo interpretar a estos personajes a quienes encarnaron durante siete temporadas.
En resumen: si erais seguidores de la serie original, probablemente no habréis esperado a leer ninguna reseña y habréis devorado los cuatro episodios, con lo que no necesitáis que nadie os los recomiende. Afortunadamente, esta mini-temporada no decepciona, y no sólo ayuda a sobrellevar la ausencia de los habitantes de Stars Hollow, sino que deja la puerta abierta a una posible continuación. ¿Acaso sucederá? Mientras esperamos a que se confirme, siempre podemos volver a ver las docenas de episodios que ya tenemos. ¡Cinco estrellas más que merecidas!
2 comments:
No soporto ni a la madre ni a la hija, son unas egoístas que solo van a la suya y encima va una de lista y la otra de tonta... no puedo. Pero me alegro que Netflix haga estas cosas a ver si le da una oportunidad a una serie buena de verdad como firefly.
Jajaja. Ya me imaginaba que ibas a decir algo parecido ;)
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