Bloodline es una serie original de Netflix cuya primera temporada Crystal y yo terminamos de ver hace un par de semanas, y que si no habéis visto, no sé a qué estáis esperando.
La acción transcurre en los Cayos de Florida, donde la familia protagonista regenta una pensión desde hace décadas. Para celebrar los logros del patriarca, el clan se reúne un fin de semana con la intención de pasárselo bien, pero cuando la oveja negra de la familia decide unirse a la fiesta, las cosas toman un cariz inesperado y los acontecimientos se precipitan. Y es que, como el hermano que narra la serie (Kyle Chandler) dice al principio del primer episodio, "no somos malas personas, pero hicimos algo malo". Ahí es nada.
A lo lago de trece episodios, los espectadores van descubriendo cuál es la relación entre los hermanos, por qué las cosas son como son, y por qué terminan como terminan. Tensa de principio a fin, y con magníficas actuaciones (mención especial merece Ben Mendelsohn), esta primera temporada de Bloodline es soberbia, y desde aquí os insto a que no os la perdáis. ¡De lo mejorcito que he visto últimamente!
8 comments:
¿Incesto?
Bueno, pues habrá que verla. Otra más.
No te la pierdas, de verdad :)
Nosotros acabamos de ver el quinto episodio de Fargo, y moooooola. Gracias por la recomendación :)
Jeje. De nada, hombre. Ardo en deseos de conocer tus impresiones cuando hayas visto la temporada completa.
Bueno pues me las apunto en mi lista a series pendientes que son un monton :-(
Al menos ésta es corta: ¡trece episodios no son nada!
Y de Fargo, Hal, nos queda el último episodio, que vamos a ver en cuanto termine de teclear esto. ¿Acaso se llevará cierto personaje su merecido? ¡Espero que sí!
¿Está en castellano aunque sea subtitulado?
Al igual que Kimmy Schmidt, dicen que estaaá disponible en octubre :)
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